El 2 de octubre, el candidato a la a gobernación por Proyecto Dignidad, Javier Jiménez, presentó su propuesta de gobierno titulada “Puerto Rico Tierra de Oportunidades”, que usted puede leer aquí.
En esta, Javier Jiménez describe su programa de gobierno como una visión clara de las políticas y acciones que reflejan el compromiso con el futuro de nuestro pueblo. Así, el candidato a la gobernación por Proyecto Dignidad describe su programa de gobierno como uno que busca una transformación amplia, profunda y necesaria en nuestro sistema gubernamental.
Puerto Rico se encuentra en un punto crítico que exige cambios significativos para superar los desafíos actuales y aprovechar nuestro potencial. Trabajar arduamente hasta lograr la despolitización de nuestras instituciones gubernamentales es esencial si queremos una transformación real. El progreso de Puerto Rico no puede seguir siendo obstaculizado por intereses partidistas o agendas personales. Javier propone un gobierno que priorice el mérito y la capacidad, asegurando que las decisiones que se tomen sean en beneficio del pueblo y no de unos pocos. Está convencido que solo así podemos reconstruir la confianza del pueblo en nuestras instituciones y garantizar que el gobierno trabaje verdaderamente para todos. La transformación gubernamental que propone se basa en la transparencia, la eficiencia y la rendición de cuentas de un gobierno que realmente sirva al pueblo, eliminando la burocracia excesiva y combatiendo la corrupción en todas sus manifestaciones. Javier sabe que necesitamos instituciones que estén al servicio de la gente, facilitando y no obstaculizando el progreso.
La descentralización del sistema de educación, el balance necesario entre la función de los planes médicos, suplidores de servicios de salud y pacientes, la atención a nuestros niños con condiciones especiales y nuestros adultos mayores, la agilidad del gobierno, el desarrollo económico y la familia son una prioridad en este programa de gobierno.
En su programa de gobierno, Proyecto Dignidad deja claro que queremos que Puerto Rico se convierta en esa tierra de oportunidades que todos anhelamos. Para eso, es imperativo fomentar un ambiente donde la innovación, la agilidad y el emprendimiento sean pilares fundamentales. Donde las empresas puedan crecer sin trabas innecesarias y donde cada ciudadano tenga la oportunidad de alcanzar sus metas. Debemos implementar políticas que impulsen la inversión, tanto local como extranjera, y que promueva la creación de empleos de calidad.
Así, Javier Jiménez expone que la libertad económica que aspiramos alcanzar no es solo un concepto, es una herramienta poderosa para mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos, reducir la pobreza y lograr la calidad de vida necesaria para que Puerto Rico pueda crecer. Para lograrlo, sabe que tenemos que unirnos a este proyecto de cambio real y que juntos podemos construir un Puerto Rico más próspero, justo y fuerte.
Con este programa de gobierno, Proyecto Dignidad busca abrir las puertas hacia el futuro, con un Puerto Rico donde el gobierno sea un aliado y no un impedimento para el crecimiento de la persona, la familia y la comunidad. Un Puerto Rico donde cada individuo tenga la oportunidad de alcanzar su máximo potencial. No hay duda que llegó el momento de actuar y de lograr la transformación que soñamos. Javier Jiménez tiene la preparación, la experiencia, la visión, el valor y la voluntad para dirigir esta transformación, que juntos, como un solo pueblo, podemos lograr. Por eso, hoy Javier Jiménez es el único candidato que tiene a su haber la experiencia probada y las propuestas claras para lograr el plan de reingeniería de gobierno que le presenta a Puerto Rico con una nueva visión para una administración pública de excelencia, capaz de transformar la forma de gobernanza en Puerto Rico.
Este proyecto de transformación es uno vivo y no escatimará en llevar a cabo todos aquellos ajustes que sean necesarios a fin de poder ofrecerle a nuestro pueblo una sana administración y el Puerto Rico que todos queremos.
Invitamos a todos a examinar nuestras propuestas y compararlas con la de los demás partidos. Quedarán convencidos que las mismas presentan una ruta coherente y práctica para un gobierno eficiente. Alejada completamente de lo que los partidos nos tienen acostumbrados, largas listas de propuestas sin coherencia, que parecen más listados de deseos que propuestas prácticas y dirigidas a cambios reales. ¡Adelante, con fe!