A solo días para uno de los eventos más transcendentales de la historia puertorriqueña en tiempos recientes: las elecciones del 2024. En estos comicios, por primera vez, miles de votantes, junto a los que han ejercido el voto adelantado en sus diversas modalidades, tendrán la posibilidad real de acabar con más de 50 años de malos gobiernos alternados del Partido Nuevo Progresista y el Partido Popular Democrático, que nos han llevado a la crisis actual.
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Décadas de quiebra económica, de pobreza constante, de criminalidad y violencia rampante, de recesiones económicas, de corrupción descarada, de una desigualdad social amenazante, con una Junta de Control Fiscal que gobierna a sus anchas. Una Asamblea Legislativa desprestigiada, inconsecuente en los asuntos fundamentales, de dimes y diretes, de sesiones en la madrugada, de aprobación de cientos de medidas sin estudio ni análisis previo. Ante todo esto, se fueron creando las condiciones políticas para la gesta de un proyecto político que fuera la alternativa real para el país.
Durante todo el cuatrienio, Juan Dalmau estuvo recorriendo el archipiélago marcando la ruta y escuchando al país. Posteriormente, luego de un proceso necesario para el país se configuró la Alianza, alcanzando los acuerdos políticos y electorales que son parte de esta campaña. En esa ruta hacia el proyecto de la Patria Nueva, transitamos del triunfo de la esperanza y el podemos ganar, al vamos a ganar. Estas no son meras consignas; la Patria Nueva es la reconstrucción del país en todas sus manifestaciones mediante un gobierno efectivo, honesto y limpio. El fortalecimiento de la candidatura de Juan Dalmau en esta recta final es evidente.
Amplios sectores del país lo reclaman para lograr un cambio verdadero en nuestra sociedad. Es el candidato de miles de personas que han vivido y sufrido el bipartidismo y se sienten traicionados, agotados y cansados de lo mismo, y ven en Juan la única alternativa para alcanzar nuestras aspiraciones como pueblo. Es el candidato del Partido Independentista Puertorriqueño y de la Alianza en confluencia histórica con el Movimiento Victoria Ciudadana, poniendo a Puerto Rico primero. El próximo a martes, triunfará la esperanza porque estamos seguros de que vamos a ganar.