Una de las tres mujeres que sobrevivieron la caída del Boeing 737 que se estrelló el viernes en La Habana falleció este lunes, según informó el Ministerio de Salud de Cuba.
Con este deceso, el saldo de víctimas mortales se elevó a 111.
Las otras dos sobrevivientes permanecen internadas en el Hospital Calixto García, en la capital cubana. Están heridas de gravedad, pero su pronóstico es reservado.
La mujer que falleció el lunes se llamaba Gretell Landrove, tenía 23 años y vivía en La Habana, donde era bailarina de flamenco y estudiaba ingeniería.
Su madre, Amparo Fong, había explicado el fin de semana a la televisión nacional que la joven había sido "dada por muerta" en un principio. "Yo no la quiero ver hasta que esté bien, que los médicos decidan. Mi niñita es una guerrera y se va a salvar", había declarado.
Pero, de las tres mujeres que luchaban por su vida en el hospital, Landrove era la que corría más peligro. Así lo había advertido a la prensa sólo tres horas antes del deceso el director de dicho centro, Carlos Alberto Martínez.
La joven había sido intervenida por un hematoma dentro del tejido cerebral y los médicos le habían hecho una incisión para descomprimir esa zona y permitir que mejorara la circulación, según informó el diario cubano Granma. Sin embargo, su estado no mejoró.
Accidente tras despegar
El avión de casi 40 años de antigüedad pertenecía a la empresa mexicana Damojh, también conocida como Global Air, pero había sido arrendado hacía menos de un mes por la aerolínea estatal Cubana de Aviación.
Partió el viernes al mediodía de La Habana con destino en la ciudad oriental de Holguín, de donde era Landrove. Pero se estrelló poco después de despegar por causas que están siendo investigadas por las autoridades cubanas con ayuda de México, el país donde tiene su sede Damojh, y de Estados Unidos, de donde es originario Boeing, el fabricante de la nave.
Las autoridades mexicanas suspendieron este lunes de forma temporal las operaciones de Global Air mientras se investiga lo sucedido, según informó la Dirección General de Aeronáutica Civil en un comunicado.
La Autoridad de Aviación Civil de Guyana ya había anulado durante el segundo trimestre del año pasado el permiso de vuelo de la aeronave siniestrada por motivos de seguridad. Sin embargo, meses después, en noviembre de 2017, el avión logró superar una inspección en México.
La caja negra que graba las voces en la cabina ya se halló y los investigadores buscan la segunda, la que registra los datos de vuelo, para poder descubrir lo que provocó el accidente.
Como Landrove, las dos sobrevivientes presentan quemaduras de gravedad. Mailén Díaz Almaguer, de 19 años, se encuentra en un "estado crítico, con alto riesgo de complicación", según Granma.
Emiley Sánchez De la O, de 39 años, respira con ayuda médica y parece mejorar, aunque tiene quemaduras en el 41% del cuerpo y Martínez temía el lunes que estas le ocasionaran complicaciones en las siguientes horas.
Ahora puedes recibir notificaciones de BBC Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.