Gerardo "Tata" Martino está de moda.
A su elección esta semana como el mejor entrenador de la Liga Profesional de Estados Unidos (MLS, por sus siglas en inglés), ahora algunos medios en México dan por hecho su nombramiento como el próximo seleccionador del Tri.
Todo en unos meses en los que el entrenador argentino se ha convertido en el técnico más codiciado del fútbol latinoamericano, cortejado tanto por México como por Colombia y Argentina para encargarse de sus respectivas selecciones nacionales.
Martino se encuentra por ahora cerrando su exitoso paso en el Atlanta United, equipo creado la temporada pasada y al que en tan solo dos años transformó en el club sensación de la MLS sumando la mayor cantidad de puntos y de goles del fútbol estadounidense.
El técnico argentino ya anunció que dejaría el equipo, pero Atlanta todavía tiene que disputar, a finales de noviembre, los partidos de la final de la Conferencia Este contra los New York Red Bulls. De ganar avanzaría a la gran final de la la Copa MLS que definirá al campeón el próximo 8 de diciembre.
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Por esa razón que se estaría aguantando el anuncio oficial del acuerdo que vincularía al "Tata" a el Tri mexicano por los próximos cuatros años, período en el que tendría como objetivos principales ganar la Copa de Oro de 2019 y clasificar al Mundial de Qatar 2022.
Eso sin mencionar que, de llegar a la cita mundialista, se le exigirá alcanzar el tan ansiado quinto partido de los cuartos de final, algo que no ha podido hacer desde 1994.
Pero, ¿es Martino el técnico ideal para dirigir a una selección como la de México, que suele tener una relación explosiva con sus entrenadores como lo demuestra el hecho que ha sufrido hasta 18 cambios de seleccionador en los últimos 18 años (sumando oficiales, interinos y suplentes)?
En BBC News Mundo buscamos la respuesta.
1. Es ganador
Martino tuvo una exitosa carrera como jugador ganando dos títulos a comienzos de los años 90 con el Newell’s Old Boys dirigido por Marcelo Bielsa.
De ahí la influencia del "Loco" en la esencia de su manera de entender el fútbol, de presión y ataque, tratando de recuperar la pelota lo más arriba posible en el campo.
Estas características podrían beneficiar a una selección mexicana que tuvo sus mejores momentos en el Mundial de Rusia cuando ahogaba a sus rivales gracias a una alta intensidad en la marca.
Pero a diferencia de su tutor, Martino también ha mostrado una capacidad de adaptación a los equipos que ha dirigido, pragmatismo que le ha permitido conseguir importantes triunfos durante su etapa en los banquillos.
Ganó cinco títulos en Paraguay con Libertad y Cerro Porteño y dirigió a la selección guaraní al Mundial de Sudáfrica 2010, clasificando en tercer lugar a un solo punto del líder Brasil.
Y en el torneo africano cayó en cuartos de final tras perder 1-0 y después de haber desperdiciado un penalti contra España, país que terminó siendo campeón.
Al año siguiente fue subcampeón de la Copa América.
Luego se hizo cargo del Newell’s Old Boys cuando el equipo estaba en peligro de descender y lo guió al título argentino en 2013 y a las semifinales de la Copa Libertadores ese mismo año.
Tuvo un año con el Barcelona con el que ganó una Supercopa de España y después asumió como técnico de la selección argentina, con la que llegó a dos finales de la Copa América.
Tras perder la segunda de ellas recaló en el Atlanta, con el que busca el título este año.
2. Eleva a los jugadores
Una de las cualidades que más se destaca del "Tata" Martino es su trato directo y personal con los futbolistas, logrando en la mayoría de los casos extraer lo mejor de ellos.
Fue así cuando estuvo al frente de Paraguay -tras su salida la selección guaraní entró en una caída en barrena quedando por fuera de los mundiales de 2014 y 2018- Newell’s y actualmente en Atlanta.
Calmado y lejos de la polémica, el técnico argentino opta por potenciar la confianza en sus jugadores ya que afirma es en la mente en donde se puede marcar las diferencias.
Este aspecto beneficiaría a los jugadores mexicanos, quienes viven constantemente expuestos al triunfalismo o pesimismo de su afición como lo reflejaron su victoria contra Alemania o la derrota frente a Suecia en el pasado Mundial.
3. Experiencia
Martino conoce exactamente los entresijos de dirigir a una selección nacional tras haber estado en un proceso mundialista con Paraguay y haber dirigido a Argentina en dos torneos de Copa América, llegando a la final en ambos.
Esa experiencia le servirá de gran ayuda de cara a la Copa de Oro del próximo año y para trabajar de cara al gran objetivo en Qatar en 2022.
Pese a lo explosivo de su proceso, Osorio demostró que en México se puede armar una selección capaz de competir en el escenario internacional y con el surgimiento de jóvenes figuras como la de Hirving Lozano, a quien seguramente Martino le sacaría el máximo de su potencial, hay jugadores importantes de cara al futuro.
La duda
En Barcelona no hay un muy buen recuerdo de la etapa del "Tata" al frente del club catalán tras terminar sin ninguno de los tres títulos más importante de la temporada: Liga, Copa y Champions League.
Esa fue el único año que el Barça no ganó nada en los últimos 10 años y todos los dedos acusadores apuntaron al técnico argentino.
En su defensa hay que señalar el difícil momento en el que llegó a un equipo tocado por la grave enfermedad y muerte de Titi Vilanova, una de las personas más importantes del club.
Luego tuvo que lidiar con una lesión que condicionó la temporada de Lionel Messi, más pendiente de asegurar su participación en el mundial de Brasil que en una gloria que ya había conseguido con el Barcelona.
Y después que tuvo el título de Liga en su manos cuando el chileno Alexis Sánchez adelantó al Barcelona en el último partido de la temporada contra el Atlético de Madrid, pero se le escapó cuando anotó el uruguayo Diego Godín para darle el campeonato al conjunto colchonero.
Tampoco terminó de convencer su paso por la selección albiceleste al perder ambas finales de la Copa América contra Chile o el pésimo comienzo que tuvo de las eliminatorias con Argentina al perder en Buenos Aires frente a Ecuador.
Luego enderezó el rumbo, pero se le critica haber abandonado el barco en pleno proceso de unas clasificatorias en las que Argentino solo pudo asegurar su presencia en Rusia 2018 en la última jornada.
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