Recientemente, en una extensa entrevista digital, Bad Bunny comentó sobre cómo el uso desmedido de los celulares ha derrotado la decencia milenaria de saludar y vivir el momento. Aquí siete consejos de Bad Bunny, de 24 años, que deben aplicarse en 2019 para una mejor convivencia. Las citas no contienen todo el lenguaje florido del Conejo.
Salude a la gente con decencia y sin esperar nada a cambio – “Hay gente que me dice: ‘Oye, Bad Bunny, una foto´, y le digo: ´Hola, ¿cómo estás?’ o ´Mucho gusto´ o algo. Pero salude. Te estoy brindando un saludo. Te importa más una foto que saludarme y hablar conmigo y compartir… Hay gente que prefiere una foto que conocerte y compartir contigo. Eso está bien loco. Eso hay que estudiarlo”.
Guarde el celular de vez en cuando para que aprecie el momento – “Yo voy a un lugar, a un concierto, no es que apague el celular, pero no lo saco. Yo he ido a tres conciertos en mi vida como espectador. Hace poco fui a un concierto de Drake y cuando salí, dije: ´Yo no grabé nada. Yo lo vi y me lo disfruté’. Yo veo que hay gente que janguea y sube mil Snapchats… y eso está cool, pero pienso que dejan de disfrutárselo. Yo prefiero llevármelo aquí (en la cabeza) grabado que en un teléfono”.
Ser pionero conlleva críticas y hay que aprender a bloquear el odio – Cuando se le preguntó a Bad Bunny sobre una decisión artística controvertible que tomó, reconoció que recibió muchos cuestionamientos, pero añadió: “Uno, cuando rompe, se lleva todas las críticas. Ya al próximo quizás se le haga más fácil. Yo me llevé el cantazo. Pero ya yo estoy inmune a los comentarios. Siempre va a haber opiniones divididas. Nunca va a haber un 100 por ciento de acuerdo”.
Si difícil es llegar, más difícil es mantenerse. La consistencia es importante – Bad Bunny reconoce que toda la fama y el éxito le llegaron relativamente de súbito, aunque llevaba trabajando años. “Yo admiro a Daddy Yankee. Lleva tres décadas en este negocio, que es difícil. La música es bella, pero la industria es una mierda. Él viene desde los noventa. El negocio no estaba establecido como tal para hacer dinero. Para mantenerse en el top, no es fácil”.
Be careful what you wish for – El éxito artístico le llegó de cantazo. La fama es chula, pero no fácil. “Lo deseé tanto y no estaba preparado. Yo soy un chamaquito low key. Ir al mall. Ese era mi estilo de vida. Ir a una barrita y darme una cerveza con los muchachos. Y después te llega todo esto de cantazo. No fue poco a poco. A mí me dieron un poco de pauta al principio. Y luego me tiran to´ eso encima. Fue duro. Ya aprendí, pero hasta hace poco yo pensaba que me podía bajar en los sitios. Me badtripea bastante que no me pueda bajar en un lugar”.
Es necesario sacar tiempo para uno mismo y velar por la salud mental – “En un momento me despegué de las redes. Renté una casa en el verano con mis amigos y mi hermano. Me quité de Instagram. Disfrutando. Compartiendo con ellos y compartía con mi familia. Me dediqué a eso, a tratar de entender por qué yo no estaba contento con tanto éxito y tanta fama. Yo sé los que me quieren de verdad. Pude despejar mi mente. Y pude analizar. Y de ahí fue que salió “Estamos bien”.
Fórmula del éxito – “Creer en ti. Ser único. Tener paciencia. Ser genuino. Ser tú”.