Las jefes y jefas de agencias del gobierno han manifestado una queja y un problema en común, casi unánimemente: la falta de personal y el consecuente deterioro de los servicios que nuestro pueblo recibe. Recientemente se celebraron vistas públicas de la Comisión Conjunta de Hacienda en las que han depuesto el Secretario de Hacienda, Francisco Parés y el Director de la Oficina de Gerencia y Presupuesto, Juan Carlos Blanco. Estos expresaron –correctamente- que este problema de falta de personal suficiente es consecuencia de políticas de austeridad como la Ley 7, que provocaron despidos masivos como una alternativa para salir de una alegada emergencia fiscal. Lejos de ser una solución al problema fiscal, los despidos gubernamentales y los recortes presupuestarios exacerban los problemas de nuestro país, dificultan el acceso a los servicios esenciales y provocan un alejamiento drástico de una posible recuperación.
Si examinamos los presupuestos actuales de las agencias gubernamentales, veremos que, aunque quienes las dirigen expresaron tener una necesidad urgente de aumentar su personal y por tanto sus presupuestos, para el próximo año fiscal se incluyen aún más recortes. Por poner un ejemplo claro del problema que enfrentamos, el Departamento de Hacienda informó en la vista pública que está operando con solamente 1,835 puestos ocupados y con 2,779 puestos vacantes. Como si esto no fuera suficiente agravio, se proyecta que el número de puestos ocupados se reduzca. Y para colmo de males, la Junta de Control Fiscal quiere continuar recortando el presupuesto de las agencias.
Es un buen paso que quienes dirigen las agencias, corporaciones públicas, juntas y oficinas del gobierno reconozcan que estas políticas de austeridad -que han implementado las administraciones PNP y PPD- no han tenido un efecto positivo, sino que, por el contrario, han provocado el deterioro de los servicios públicos y han afectado adversamente la calidad de vida de la clase trabajadora. Por tanto, tienen el deber de expresarse en contra de éstas para poder cumplir con sus deberes ministeriales. La exhortación de la Delegación del Movimiento Victoria Ciudadana es a que enfrenten a la Junta de Control Fiscal y exijan un mayor presupuesto, más y mejores recursos de los que están proponiendo. ¡La gente antes que la deuda!
