Hace unas semanas dialogaba con un amigo médico sobre la “nueva” cepa de políticos “emergentes” y cómo han mostrado ser igual a los demás, aunque el discurso sea que ellos son distintos. “Alex, son los mismos puertorriqueños que viven en la misma isla, expuestos a las mismas costumbres”, me respondió.
El caso de la legisladora del partido Victoria Ciudadana, Lcda. Mariana Nogales, muestra precisamente que, por más que digan que no son iguales, los políticos de esta colectividad tienen comportamientos exactamente iguales a la “vieja y legendaria escuela”.
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Pusieron una vara muy alta para lo que, para ellos, tiene que ser el modelo angelical del político. No obstante, como los demás políticos, ese modelo es para aplicarle a los adversarios, no a ellos mismos. Si sus adversarios políticos no cumplen con la biblia de Victoria Ciudadana, son deshonestos, bandidos, corruptos, grandes intereses, buitres, demonios… Si uno de los suyos no cumple, es un simple olvido, una confusión porque “los documentos no eran claros”.
A raíz de su revelación en una entrevista, en NotiUno 630, de que tenía una propiedad en el lujoso y exclusivo complejo de Palmas del Mar en Humacao, a la representante Nogales le reventaron otras cosas. La pregunta iba porque mientras ella protestaba en Rincón contra una propiedad que tenía una piscina – o intentaba reconstruir parte de sus facilidades- en la zona marítimo terrestre, ella “poseía” un apartamento en el otro lado de la isla, también con facilidades en la zona marítimo terrestre. “Eso te lo tengo que admitir”, dijo Nogales cuando se le preguntó si el complejo en el que estaba la propiedad tenía facilidades en la zona marítimo terrestre.
La representante aseguró públicamente que nada tenía que ver ella con el apartamento, y que eso era un negocio de su mamá, que allí solo estaba su nombre como que “prestado”, debo suponer. Tras sus expresiones, comenzaron a reventar “chichones” que contradecían lo que decía la legisladora y que revelaban que, además de no haber sido totalmente honesta en su presentación de los hechos, había más propiedades y que su nombre no era un simple “préstamo” a su mamá. Han sido cerca de 10 propiedades y un manejo de capital de hasta casi 2 millones de dólares. Aunque ella insiste en que es un negocio de su mamá, ella es la que aparece como Presidenta, Tesorera y otras funciones desde 1993, es decir, casi 20 años. Otra controversia destapada es la deuda al CRIM de cerca de $200,000.00 por este negocio y que una de las funcionarias de la corporación era una empleada de su oficina legislativa.
Mariana Nogales no comunicó la existencia de estas propiedades y otros asuntos en los informes éticos. Tras la investigación legislativa, el informe de la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes concluyó: “La participación de la representante Nogales Molinelli en las referidas corporaciones era una activa en la que se le delegaban funciones financieras en varias de las corporaciones y en otras tenía cargos de envergadura. Más aún, una empleada de su oficina era parte de una de las corporaciones. Por lo cual, esta Comisión entiende que esta acción no puede catalogarse como una inadvertencia o un olvido. La Comisión cataloga esta acción como una negligencia de la representante Nogales”.
Volvemos. Un hecho como ese, en el caso de un político del PNP, el PPD o el PIP, en el diccionario de Victoria Ciudadana sería deshonestidad, corrupción, etc. En el caso de ella, es un simple y llanito “olvido”. Alegó la legisladora que ¡no sabía que tenía que informar la corporación ni las propiedades!
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Argumentó que entendió que no tenía que informarlo porque no había sido algo ocurrido como empleada de gobierno. What! Yo pudiera entender eso de un político sin los cursos académicos que ella ha tomado, pero ¿de una abogada? Si un político de barricada viniera con ese cuento, no le creería. Por lo tanto, que una abogada exponga que entendió eso es menos creíble.
¿Qué dice el documento que ella alega se presta para confusión?
“Puestos ocupados EN Y FUERA del gobierno durante los últimos dos años”. ¿“… y fuera del gobierno” no es lo suficientemente claro para una abogada, una persona inteligente y preparada académicamente? No estamos hablando de un inculto. Algo que quizás hubiera sido más creíble es:“mire, yo no lleno esos documentos, solo los firmé y sí, fallé en confiar demasiado en la persona que los llenó y no revisarlos”. Eso sí puede pasar. Queda como un error y no como una persona deshonesta. Digo, si insiste en que no mintió y que “en y fuera del gobierno” es algo muy confuso, pues la verdad que el que un legislador muestre ese nivel de “confusión” con cosas tan y tan simples es más preocupante.
“El MVC nos ofrenda el primer legislador multado del cuatrienio”, dijo el exgobernador Alejandro García Padilla. Muy llamativa esa expresión que acentúa la contradicción de que la colectividad que casi comparaba el bipartidismo con una peste bubónica haya sido el primero en poncharse en su primer turno al bate a la hora de ejecutar la pulcritud por la que rasgaban vestiduras. “El partido que venía decía que era distinto a todos los demás y que ellos jamás iban a pisar la raya del ’outside’. Resulta ser el Partido Victoria Ciudadana el que nos da en ofrenda el primer legislador sancionado, multado y que está siendo investigado por el Departamento de Justicia del cuatrienio. No les tomó un año.”, añadió García Padilla.
“Nunca he cometido ni se me han imputado actos de corrupción o ilegales“, dijo Mariana Nogales hace unos días. Bueno, yo no puedo llamarle corrupción como tal a su acto de omitir algo tan obvio y que debía informar, en el sentido de que no es un acto en el cuál recibió algún beneficio personal por dicha omisión… Entiendo. Pero ¿no es ilegal su omisión? Bueno, pues si no es ilegal, que llegue al Tribunal Celestial y pelee esa multa. ¿Lo hará?
Finalmente, la legisladora argumenta que esto es una persecución por su rol legislativo y que lo que buscan es destruir su reputación. En primer lugar, su correligionario en el MVC, Bernardo “Betito” Marquez votó a favor de tomar acción contra ella. ¿Él la persigue y busca destruir su reputación? En segundo lugar, representante Nogales, como periodista, no se trata de persecución ni de destruir reputaciones. Se trata de fiscalizar, como hace usted y como hacemos con líderes políticos, con el gobierno, los alcaldes y otros.
Ahora bien, ¿porque usted y los líderes del partido Victoria Ciudadana entienden que deben ser tratados distinto, que no se les debe fiscalizar? Si esa es la apreciación de los líderes de la colectividad, me parecería una narcisista y, lamentablemente, en ese sentido, hay malas noticias para usted… y para ellos.
El partido Victoria Ciudadana debe ser y será fiscalizado como cualquier otro partido porque son los mismo, son iguales y así hay que tratarlos.