En una movida poco común el pasado 8 de diciembre a las 4:24 pm el PNP presentó ante el Departamento de Estado la creación de la nueva corporación sin fines de lucro “Partido Nuevo Progresista, Inc.”. Esto con el fin de “participar en las elecciones electorales y realizar actividades dirigidas a promover el bienestar y la Estadidad para Puerto Rico en Unión Permanente con los Estados Unidos de América.” Entre los oficiales de la corporación de nueva creación se encuentra el Gobernador Pierluisi como presidente y el senador Carmelo Ríos como secretario y agente incorporador.
La corporación de Pierluisi se da en momentos en que reconocidas figuras de su colectividad, principalmente alcaldes, han sido arrestados, se han declarado culpables o son mencionados con insistencia por un esquema de sobornos por parte de varias corporaciones privadas, en su mayoría bajo la tutela del Lcdo. Oscar Santamaría y otros de sus socios. Pero la cosa no queda ahí. Varios alcaldes del PNP, bajo condición de anonimato, han descrito cómo a partir de noviembre de 2020, y desde la misma Federación de Alcaldes, se movía un andamiaje para llevarlos a sentarse con el mismo Santamaría que le pagaba sobornos a ‘El Cano’ y, según se alega, al entonces alcalde de Guaynabo y Presidente de la misma Federación. Evidentemente, El Cano y la Federación de Ángel Pérez estaban trabajando para allegar más “clientes” al Lcdo Santamaría.
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La pregunta que el país se hace es ¿entenderá realmente la corporación de Pierluisi la magnitud de lo que se está descubriendo? ¿Comprenderá la corporación de Pierluisi que las denuncias presentan un esquema corrupto orquestado que al parecer surgía de las entrañas de su partido?
A nadie le queda claro si en efecto la corporación de Pierluisi entiende lo que está sucediendo y cómo están manejando la potencial bomba que estallaría con más arrestos de funcionarios electos del PNP por el esquema diseñado por figuras prominentes y altamente conocidas del partido azul. La respuesta a esa pregunta solo a saben ellos. Sin embargo, lo que sí está claro es que el país está atento a las acciones que se tomarán para evitar casos como los que hemos visto en estos días y los que al parecer faltan. Ya a inicios de los 2000 vimos el fruto nefasto de un claro esquema de corrupción ideado y ejecutado por una administración del PNP. Queda pendiente la pregunta: ¿entenderá Pierluisi lo que está sucediendo en su corporación PNP?