La energía eléctrica es un derecho humano fundamental. El acceso planificado y garantizado de la energía a la ciudadanía permite el desarrollo del bienestar común y la justicia social. Redunda, además, en una mejor calidad de vida, acceso a servicios e incluso, en la era de la internet, representa un puente al conocimiento e información.
Desde que se propuso la llegada de AES estuvimos en contra de su establecimiento y el tiempo dio la razón a las diversas organizaciones que nos opusimos. Lejos de promover e instaurar políticas de energía renovables, los gobiernos en Puerto Rico han perpetuado la energía sucia, afectando a comunidades como es el caso del almacenamiento y depósito de cenizas tóxicas en Guayama y Peñuelas. Dicho sea de paso, aún falta por cuantificar los daños producto del uso de cenizas en calles y construcciones del país.
PUBLICIDAD
Recientemente AES solicitó un rescate financiero al gobierno que desde el PIP catalogamos como un mantengo corporativo con esteroides. Como indicó la compañera María de Lourdes Santiago, ante la incapacidad gerencial para anticipar sus costos, AES pide ahora la socialización de sus pérdidas para que todos paguemos por lo que dejan de generar. Se atreven a pedir que nos quedemos con una planta obsoleta, que carguemos con el precio de la adquisición de su carbón, que le subsidiemos los daños ambientales que a sabiendas causan, que asumamos el costo de mantener su muelle, pero que se le garanticen ganancias con un contrato de operación y que se le privilegie con un nuevo contrato para energía solar.
Insistiremos en la aprobación del proyecto 430 de nuestra autoría, para eliminar la dependencia y uso de la generación de energía a base de carbón y la resolución conjunta 2 de la compañera María de Lourdes Santiago para ordenar al Departamento de Salud y a la Escuela de Salud Pública de la UPR que realicen, de manera conjunta, un avalúo de las condiciones de salud de diversas comunidades en Guayama considerando la relación que pudieran tener con la exposición a las cenizas tóxicas producto de la quema de carbón para generar energía de AES.
