A la par con el caso por una supuesta deuda pendiente con el jugador Carlos Arroyo, la Junta de Directores del Baloncesto Superior Nacional (BSN) determinó colocar al veterano apoderado de los Cariduros de Fajardo, Félix “Felo” Rivera en un periodo de probatoria.
Esta determinación vino acompañada de un aviso por el cual, de no cumplir con las medidas aprobadas por los otros apoderados de las franquicias, Rivera podría ser expulsado de la liga profesional.
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Según el comunicado de prensa emitido por el BSN, las medidas acordadas permitirán “el pago a la deuda de los jugadores de Fajardo y una participación estable” de Fajardo en la temporada 2019, que comienza este próximo 1 de marzo.
El acuerdo, aún no firmado, establece que Rivera deberá pagar el monto adeudado por el equipo al BSN por concepto de la utilización del fondo de garantía salarial que se activó el pasado 5 de septiembre para atender nueve reclamaciones de cobro de jugadores.
Una vez hecho esto, el funcionario podrá acceder nuevamente a este dinero para cubrir otras deudas que tenga pendiente y los gastos para correr la franquicia.
El BSN no reveló bajo qué “garantías acordadas” se le permitiría volver a tomar dinero de esta cuenta.
Como parte de las restricciones que se le impusieron a “Felo” Rivera, también está su remoción de todos los comités del BSN y la asignación de un supervisor fiscal que aprobará todas las transacciones de carácter económico.
Recientemente, el apoderado y Arroyo añadieron otro capítulo a su relación cuando el atleta no acudió a una vista celebrada por el BSN que serviría para adjudicar el recalmos entre ambos. El caso es uno complicado porque trata de la temporada 2018 cuando Rivera y Arroyo compartieron la posición de coapoderados.
