La joven Andrea Avilés Cordero es la primera persona de origen puertorriqueño en ser aceptada en el programa de maestría Bioentrepreneurship la prestigiosa universidad Karolinska Institutet, reconocida mundialmente por otorgar el Premio Nobel de Medicina, según confirmó la propia institución universitaria. La joven se trasladará a Suecia en septiembre para dar inicio a sus estudios graduados.
Avilés Cordero culminó recientemente su bachillerato en Biología en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, aunque durante su carrera universitaria y desde muy joven se ha destacado en diversas facetas. Ha trabajado con entidades benéficas como March of Dimes, MedLife, La Fondita de Jesús y el Hospital del Niño, y ha sido parte de diversas iniciativas.
“He sido muy determinada desde bien pequeña. Soy una persona muy dinámica y siempre he tenido esta visión de estar comprometida con la sociedad”, expresó la joven de 23 años.
El bioempresarismo es la disciplina que integra las ciencias y la administración de empresas. Según explicó la propia estudiante, dicha disciplina desarrolla y comercializa productos biotecnológicos, agilizando la distribución de estos para beneficio de los seres humanos. De acuerdo a Avilés, este programa ha tenido recientemente un gran auge debido a los avances de la industria biotecnológica.
Para poder completar esa meta, Andrea ha tenido también que recurrir a préstamos que permitan cubrir los gastos. No obstante, la suma que ha logrado obtener solo cubre un 15 % del total, que asciende a $42 mil, solamente el costo directo de la matrícula de estudios. Si usted desea cooperar con esta joven emprendedora, puede hacer su donativo a través de www.gofundme.com./boricua-en-suecia.
La estudiante aprovechó la oportunidad para enviarle un mensaje a otros alumnos universitarios.
“No te limites. Si ves una universidad con un mérito o con un prestigio, no te intimides porque la realidad es que la educación de Puerto Rico es buena y el conocimiento que uno obtiene es competente, y uno tiene que creer en uno mismo, porque la realidad es que, si yo me hubiese intimidado porque es la universidad que otorga el Premio Nobel en Medicina, no estaría aquí ahora mismo”, apuntó.