DES MOINES, Iowa, EE.UU. — El apasionado llamado de Oprah Winfrey por un “mañana más brillante incluso en nuestras noches más oscuras” en los Globos de Oro, ha hecho que los activistas del Partido Demócrata empiecen a hacer ruido sobre la superestrella de televisión y la contienda presidencial de 2020, incluso si solo es una fantasía.
A pesar de esto, para los demócratas en los estados que votan primero y quizá para la población que en su mayoría no aprueba el desempeño del presidente Donald Trump, la idea de una figura mediática popular como candidata presidencial no es tan extraña como alguna vez pareció, sobre todo ante el hecho de que el empresario neoyorquino de bienes raíces y astro de reality shows está ahora en la Casa Blanca.
“Mira, es ridículo, y lo entiendo. Pero al mismo tiempo la política es ridícula en este momento”, dijo el operador demócrata de Iowa Brad Anderson, un excandidato estatal quien también estuvo a cargo de la campaña de reelección del presidente Barack Obama en 2012 en Iowa.
El discurso de Winfrey al aceptar el domingo el premio Cecil B. DeMille a la trayectoria, abordó sus orígenes humildes y la admiración que le provocaban durante la infancia los defensores de los derechos civiles.
Pero fue su exhortación a las legiones de mujeres que han denunciado a acosadores sexuales y su sueño de que llegue el día en que “nadie tenga que decir de nuevo ‘a mí también’” que ha hecho que algunos operadores políticos en estados que votarán primero, como Iowa y New Hampshire, piensen que Winfrey podría ser lo que los demócratas necesitan.
“Creo que necesitamos más modelos como ella que le hablan a las mujeres jóvenes y tratan de restaurar algo de esperanza. La elección de Donald Trump fue un devastador revés para las niñas”, dijo Liz Purdy, quien encabezó la campaña de Hillary Clinton para las elecciones primarias del Partido Demócrata en 2008.
La aprobación al desempeño de Trump era de 32% en diciembre, de acuerdo con un sondeo de The Associated Press y NORC. Aunque las encuestas muestran que su aprobación ha aumentado ligeramente desde entonces, Trump es el presidente menos popular en su primer año de mandato desde que se llevan registros. También ha sido acusado por múltiples mujeres de incurrir en conducta sexual inapropiada, aunque el mandatario ha negado vehementemente las acusaciones.
En septiembre y octubre, Winfrey rechazó públicamente la idea de aspirar a la presidencia, aunque señaló que la victoria de Trump le hizo repensar los requisitos para asumir el cargo.
El lunes, un representante de Winfrey no respondió a una solicitud de The Associated Press para conocer sus comentarios. La pareja de Winfrey por años, Stedman Graham, dijo al periódico Los Angeles Times que “depende de la gente” si ella será presidenta, y agregó: “Definitivamente lo haría”.
Winfrey, de 64 años, se ha convertido en un fenómeno cultural en los últimos 30 años. Nació en una familia pobre de Mississippi pero logró el éxito como presentadora de televisión y programas de entrevistas. Por más de tres décadas se convirtió en el rostro de los programas de tertulia, actuó en cine, produjo películas y comenzó su propio canal de televisión.
El mismo Trump ha elogiado a Winfrey a lo largo de los años, incluyendo una vez en 2015, cuando dijo que la consideraría como una compañera en su campaña republicana. “Me gusta Oprah”, dijo Trump a ABC News en junio de 2015. “Creo que Oprah sería genial, me encantaría tener a Oprah. Creo que ganaríamos fácilmente de hecho”.
Trump hizo comentarios similares en 1999, cuando sopesaba una posible candidatura presidencial en el Partido Reformista. “Si ella lo hace sería fantástica. Ella es popular, es brillante y es una mujer maravillosa”, dijo Trump a CNN.
Algunos consideran que ella tiene lo que se necesita para ser un candidato presidencia viable.
“Sería una candidata seria”, dijo Jennifer Palmieri, ex directora de comunicaciones de la Casa Blanca durante la presidencia de Barack Obama y directora de comunicaciones de la campaña de Hillary Clinton en 2016.
Más allá de su ascenso desde la pobreza, el éxito de Winfrey como una figura multidimensional se ha debido a su apoyo a maneras en las que las mujeres se pueden reafirmar, típicamente fuera de la política. Esto podría suavizar lo que Palmieri describe como la resistencia de algunos votantes a las mujeres con ambición política.
“Creo que las lecciones que todos aprendimos de la campaña de Hillary y de cómo su ambición fue vista desfavorable e injustamente, se suman a la popularidad de Oprah y le podría dar a Oprah un buen comienzo”, dijo Palmieri.
Está además el peso político que Winfrey pudiese tener. Ella participó en un acto político de Iowa para el entonces senador Barack Obama en las semanas previas a su sorpresiva victoria en las nominaciones estatales de 2008, que ayudaron a propulsarlo a la nominación presidencial.
A pesar de esto, algunos demócratas adoptarían el estatus de celebridad ajena a la política de Winfrey como la respuesta del partido a Trump, aunque la líder de la minoría Nancy Pelosi, también señaló que Winfrey, como Trump, no tiene ningún tipo de experiencia en el gobierno.
“Creo que uno de los argumentos a favor de Oprah es el 45″, dijo Pelosi en referencia a Trump, quien es el presidente 45. ” Creo que uno de los argumentos en contra de Oprah también es el 45″.