COPENHAGUE, Dinamarca — Bibi Andersson, la actriz sueca que protagonizó películas clásicas de su compatriota Ingmar Bergman que incluyen “El séptimo sello” y “Persona”, falleció. Tenía 83 años.
Andersson murió el domingo, dijo Martin Frostberg, vocero del Instituto de Cine Sueco.
El instituto financiado por el estado destacó el lunes que Monday Andersson fue la única persona que haya sido nombrada en cuatro ocasiones mejor actriz en su gala anual de premios.
En 1958, Andersson también obtuvo el premio a la mejor actriz en el Festival de Cine de Cannes por su trabajo en la cinta de Bergman “Tres almas desnudas”. Cinco años después recibió el mismo premio en el Festival de Cine de Berlín por su actuación en “La amante” de Vilgot Sjoman.
“Sus logros en el cine sueco no pueden ser sobrevalorados”, dijo la directora ejecutiva del Instituto de Cine Sueco, Anna Serner, en un comunicado.
Andersson “será recordada por siempre como una de las actrices verdaderamente grandes de Suecia”, agregó.
Nacida en Estocolmo el 11 de noviembre de 1935, Berit Elisabet Andersson, que era su verdadero nombre, apareció en más de 90 películas, 13 de ellas dirigidas por Bergman.
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Ambos se conocieron en 1951 cuando Bergman la dirigió en una serie de comerciales de jabón, según el instituto.
La carrera de Andersson se expandió en la década de 1970 a grandes producciones en el extranjero. Apareció en películas de directores como John Huston y Robert Altman y compartió créditos con actores como Paul Newman, Sidney Poitier y Steve McQueen.
Entonces se dedicó a dirigir obras de teatro en Estocolmo hasta que sufrió un derrame cerebral en el 2009 y desapareció de la luz pública.
Le sobreviven su hija, Jenny, y su tercer esposo Gabriel Mora Baeza. Los arreglos fúnebres no fueron anunciados.
