Cada vez son más las celebridades que deciden dejar de lado la fanfarria de cara a su gran día, incluidos la cantante Lily Allen y el actor y protagonista de Stranger Things, David Harbour. La pareja ha seguido el ejemplo de los jóvenes Sophie Turner y Joe Jonas y este lunes se casaron por sorpresa en Las Vegas, justo un día después de obtener la licencia matrimonial correspondiente.
El enlace fue oficiado por un imitador de Elvis Presley en una de las capillas más famosas de la ciudad: Graceland Wedding Chapel. La recepción posterior también se salió de lo común al apostar por una cadena de comida rápida; según mostró Lily en su cuenta de Instagram, donde ha compartido tres imágenes de la jornada, el banquete consistió en hamburguesas de In-N-Out.
Parece ser que los únicos asistentes fueron las dos hijas que ella tiene fruto de su anterior matrimonio, Ethel y Marnie. Este verano las niñas ya habían pasado parte de sus vacaciones disfrutando de Croacia con su madre y su padrastro.
La novia apostó por un vestido corto de la firma Dior que cedía todo el protagonismo a sus hombros gracias a su escote barco cruzado y marcaba la cintura con un cinturón estrecho.
Esta original ceremonia fue el broche de oro perfecto para una historia de amor que comenzó el año pasado de una forma poco convencional. Para su primera cita, David se puso una antigua camiseta promocional de una de las giras de Lily que había comprado en eBay, y no dudó en explicarle a la artista que la calidad de su merchandising dejaba mucho que desear.
