Los príncipes Guillermo y Enrique emitieron comunicados separados el lunes para rendir homenaje a su abuelo, el príncipe Felipe, quien murió la semana pasada a los 99 años.
Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono, se comprometió a “continuar con el trabajo” de servir a la reina Isabel II. Él y su hermano son los miembros más recientes de la Familia Real que honran el servicio de Felipe a la nación y a la monarca.
“Mi abuelo fue un hombre extraordinario y parte de una generación extraordinaria”, dijo Guillermo en un comunicado publicado en Twitter. “Catalina y yo continuaremos haciendo lo que él hubiera querido y apoyaremos a la reina en los años venideros. Extrañaré a mi abuelo, pero sé que él querría que continuemos con el trabajo”.
Guillermo y su esposa publicaron una foto de Felipe con su bisnieto, el príncipe Jorge, el hijo mayor de la pareja.
La oficina del príncipe Enrique también emitió una declaración en la que se describió a Felipe como un hombre que fue “auténticamente él mismo”.
“Será recordado como el consorte real más antiguo de la Monarca, un militar condecorado, un príncipe y un duque”, dijo Enrique. “Pero para mí, como muchos de los quienes han perdido un ser querido o abuelo por el dolor del pasado año, él era mi abuelo: maestro de la barbacoa, leyenda de las bromas y descarado hasta el final”.
Los comentarios se publicaron mientras la Cámara de los Comunes de Gran Bretaña, que salió temprano de su receso de Pascua, comenzaba a rendir homenaje al príncipe Felipe, también conocido como el duque de Edimburgo.
El primer ministro Boris Johnson dijo que Felipe “protegió a la monarquía a través de todas las vicisitudes” de las últimas siete décadas.
“Nos da a todos un ejemplo de abnegación y de poner a los demás antes que a nosotros mismos”, dijo Johnson. “Hizo de este país un lugar mejor”.
