Dan Brandon era un amante de los animales y en su casa tenía diez serpientes y 12 tarántulas, y su querendona era Tiny, una gran pitón.
Hace unos meses, el hombre de 31 años apareció muerto en su habitación y no había signos de que alguien hubiera entrado al lugar y no se habían robado nada, por lo que su mascota aparecía como la principal sospechosa.
El forense Andrew Bradley entregó hoy los detalles del trágico suceso y determinó que Tiny fue la “directa responsable de la muerte de Dan”, indica el Daily Mail.
Según el informe, el forense no cree “de ninguna manera” que haya sido una agresión por parte de la pitón y para él “fue una muestra de afecto” de la serpiente el momento en que Tiny empezó a apretar al cuello de Dan y lo ahorcó hasta la muerte.
Además, se detalló que Dan no tenía “marcas de mordiscos o heridas” y que no había ningún signo de agresión por parte de la pitón.
Los padres, el hermano y la hermana de Brandon estaban en la corte para escuchar la lectura del informe, y la madre aseguró que la serpiente “amaba a su hijo”, que “era su bebé”, “pero que era consciente de lo fuerte que era”.
En una declaración pública, la madre también señaló que la familia había perdido a “un hijo, hermano, tío, mejor amigo y compañero de bebidas y una de las personas más divertidas que podrías desear conocer”.
“Lloro todos los días y lo revivo todo el tiempo, lo único que la familia ha querido son respuestas y no sé si tenemos eso”, agregó.
