Anthony Burgess Jr. viajaba en su auto junto a su hija y se detuvo por un momento para saludar a un amigo en un complejo de departamentos en Castleton, un barrio de Indianapolis.
El joven de 24 años dejó el vehículo andando y con estupor vio como en un momento comenzaba a desplazarse hacia un estanque “congelado”.
Se cree que la pequeña de tres años sacó el freno de mano y el vehículo se deslizó hacia el agua helada, señala Fox59.
Burgess y su amigo no sabían nadar, sin embargo se lanzaron de inmediato al agua para sacar a la niña desde dentro del auto.
Después de varios intentos, el padre logró rescatar a la pequeña y entregársela a otras personas que habían llegado a ayudar, sin embargo el joven no logró salir y desapareció de la vista de todos.
Los bomberos y los servicios de urgencia llegaron al lugar de inmediato, pero sólo lograron sacar a Burgess del agua congelada 19 minutos después de que se había perdido.
El hombre fue llevado en condición crítica al hospital más cercano, pero no pudo resistir y falleció la noche del domingo, sólo unas horas después del incidente.
En tanto, la pequeña de tres años también llegó en condición crítica al recinto asistencial, pero afortunadamente se pudo recuperar y ayer fue sacada de cuidados intensivos.