Aunque hace unos años los mosquitos han ido desarrollado resistencia a los insecticidas, los resultados de las pruebas más recientes en Puerto Rico reflejan que estos vectores del dengue, zika y chickungunya ya se muestran invulnerables a la mayoría de los insecticidas.
Así lo establecen los análisis de la Unidad de Control de Vectores, que realizan con frecuencia en su laboratorio, donde reciben 1,700 trampas de mosquitos de siete municipios de la isla en el área Metro, Caguas y Ponce.
“Hemos colectado huevos de mosquitos en diferentes partes de la isla y hemos encontrado en todos nuestros estudios que el mosquito aedes aegypti es resistente a la gran mayoría de estos insecticidas”, estableció en entrevista con Metro la directora asociada de la Unidad de Control de Vectores, Marian Yoly Ortiz.
Abundó que esta situación “significa que los insecticidas están perdiendo efectividad y por tanto no deben ser utilizados como único mecanismo de control del mosquito de aedes aegypti”. Los insecticidas más comunes en Puerto Rico son permetrina y deltametrina, que se encuentran en los diferentes programas de control.
Aclaró que las pruebas de resistencia se realizan en insecticidas y no en repelentes, pues estos no han creado resistencia a los repelentes.
“Desde los 60 se han estado observando que los mosquitos han ido desarrollando resistencia. Lo que es nuevo es que se vea en todas las áreas donde hemos estado monitoreando y a todos los insecticidas que hemos hecho pruebas, que son autorizados para ser utilizados en Puerto Rico”, sostuvo Ortiz, quien plan-teó que las opciones alternas que están auscultando son explorar insecticidas que sean completamente nuevos y combinarlos con otros métodos.
Sobre la resistencia de los mosquitos a los insecticidas, la funcionaria detalló que representa una “limitación para controlar este mosquito y ciertamente las técnicas que se están utilizando no son las más efectivas, así que en el caso de una epidemia tenemos dificultades para poder controlarlo”.
“Estamos tratando de movernos a métodos que sean ecoamigables, que se hayan probado en diferentes lugares, que sean buenos para salud de personas, animales y mascotas y costoefectivos”, precisó. Además se está analizando el desarrollo de machos estériles –el cual no pica–para reducir la población.
“En estos momentos realmente los resultados son bastantes desalentadores porque la mayoría de los insecticidas que estamos probando tienen bien bien poca efectividad así que sí habría que evaluar otras alternativas”, dijo Ortiz al abordarle sobre qué se espera de cara al futuro.
Entre las recomendaciones para el control de mosquitos, la principal es ser proactivos en la reducción de criaderos, a través de inspecciones semanales en los patios identificando lugares que puedan acumular agua, vaciarla, cepillar el borde y paredes que es donde colocan los huevos y tapar el envase. Se recomienda hacerlo semanalmente debido a que este es el ciclo de vida del mosquito. La Unidad desarrolló la aplicación móvil “Mosquítalo”para monitorear el proceso de eliminación de criaderos. También se propone usar larvicidas y repelentes aprobados con ingredientes activos como deet con más de un 30 % y picaridin. Particularmente en el caso de zafacones soterrados, piscinas o fuentes –que podrían servir de criaderos y no se pueden tapar– se sugiere el uso de larvicidas.
Recomendaciones
- Vaciar, cepillar y tapar envases que acumulen agua
- Usar repelente
- Larvicidas en agua que no se pueda tapar, como fuentes
- Alternar los insecticidas en caso de que funcionen.
