Para diagnosticar efectivamente el coronavirus (COVID-19), es necesario someterse a una prueba de laboratorio llamada PCR (polymerase chain reaction, por sus siglas en inglés). Esta prueba permite amplificar pequeños fragmentos de ADN para identificar gérmenes microscópicos que causan enfermedades.
La prueba podría parecerse a la de influenza, pero la diferencia es que se realiza con un hisopado particular (hisopo de plástico) y con un kit específico para el cultivo de nasofaríngeas.
“Se recomiendan dos tipos de muestra, una muestra del tracto respiratorio inferior y superior, para aumentar las probabilidades de detectar el virus. El tracto respiratorio inferior se refiere, por ejemplo, a la flema.Si la persona está tosiendo con flema, se debe tomar esa muestra, y lo otro es el hisopado faríngeo con el palito”, explicó la infectóloga Vanessa Oliva Echavarry, al destacar que en Puerto Rico solamente se está realizando el cultivo de nasofaríngeas.
De acuerdo con la experta, nunca se pueden tomar los resultados como cien porciento positivos o no.
“Un PCR lo que va a detectar es el ADN del virus en la muestra. Lo que detecta es la información genética. Si la prueba resulta en un 95 % de sentividad, esto significa que si es positivo es positivo. Pero siempre existe la duda, porque puedes tener 1 % que puede ser un falso negativo”, detalló.
Según Oliva Echavarry, puede resultar un falso negativo si la muestra está mal tomada o si el kit está dañado o defectuoso.
“Hay posibilidad de que existan falsos negativos, pero hasta que no se realicen las pruebas, no vamos a tener la información. Mientras no se hagan las muestras como se supone, no vamos a saber. Se supone que a toda persona que tenga alguna sintomatología, se le haga la prueba. Esto sería lo ideal, pero dudo que en Puerto Rico tengamos todos los kits para hacer las pruebas a todas las personas”, señaló.
En ese sentido, la infectóloga Ángeles Rodríguez añadió: “Nosotros los clínicos no tenemos la información del valor predictivo de las pruebas. Con esto me refiero, por ejemplo, a la prueba del zika. Era sensitiva si se hacía los primeros tres días. Después de los tres días, la prueba perdía la capacidad de detectar el virus, porque había menos presencia de virus”.
“La sensitividad de una prueba es la capacidad de capturar a todas las personas que puedan ser positivas, aunque pueda tener algunos falsos. Un falso negativo significa que salga la prueba positiva y la persona no tiene la enfermedad. El falso positivo sería que salga positivo, y la persona no tiene la enfermedad. Es decir, que diga que tiene coronavirus, y no tiene; es un falso positivo. Que diga que no tiene y la persona sí lo tiene es un falso negativo”, precisó.
La pruebas para detectar coronavirus son realizadas por tecnólogos médicos. Son los únicos profesionales de la salud autorizados para realizar los análisis clínicos.
“Es muy importante que la prueba sea tomada de manera correcta para evitar falsos negativos. Prácticamente, en esta prueba, no hay falsos positivos. De haber falsos negativos, sería por la toma de muestra. La prueba, al ser molecular, es altamente específica, ya que se está amplificando el material genético”, indicó Lillian Otero Cordero, presidenta del Colegio de Tecnólogos Médicos de Puerto Rico.
En ese aspecto, destacó la labor de los profesionales de la salud, que en estos momentos arriesgan sus vidas por el bienestar de todos.
“Pero debo hacer énfasis en la importancia del tecnólogo médico en estos momentos de emergencia. Sin el tecnólogo médico, no tendríamos resultados de las pruebas de coronavirus. El que los profesionales de la salud puedan saber si el paciente dio positivo o negativo es gracias a la labor de los tecnólogos médicos”, planteó.