Ginebra – Una de cada diez personas que contrajeron COVID-19 sigue mostrando “una mala salud persistente” 12 semanas después de infectarse, indicó la división europea de la Organización Mundial de la Salud.
Aún se desconoce mucho sobre el llamado “COVID persistente”, pero “la carga es real, y es significativa”, indicó el doctor Hans Kluge, director de OMS en Europa.
En una nota breve sobre medidas publicada el jueves, la rama europea del organismo instó a los legisladores a hacer más por reconocer y atender el COVID persistente, que puede provocar fatiga grave, dolor en el pecho, inflamación del corazón, dolor de cabeza, problemas de memoria, depresión, pérdida del olfato, fiebre recurrente, diarrea y pitidos en los oídos.
Una de cada cuatro personas con COVID-19 muestra síntomas en torno a un mes después de dar positivo, mientras que uno de cada 10 sufre síntomas después de 12 semanas, señaló la agencia.
El coronavirus se sigue propagando “a un ritmo muy rápido” por la región de 53 países, indicó Kluge a la prensa, que señaló a dos variantes especialmente preocupantes. Sin embargo, añadió, se han registrado menos de un millón de casos nuevos por segunda semana seguida y los contagios están bajando.