Se han convertido en una amenaza para el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín, las siembras de muchos agricultores y hasta para la supervivencia de algunas especies en peligro extinción en Puerto Rico, pero la iguana o gallina de palo se ha convertido en un negocio lucrativo en lugares donde se aprecia su carne.
“En este momento la libra de carne de iguana capturada en Puerto Rico se está vendiendo a 39.99 dólares en el estado de Massachusetts y esas son capturadas en el Estuario de San Juan”, dijo el jueves el profesor Rafael Joglar, director del Proyecto Coquí.
Pero a pesar de que la venta de carne de esta especie invasora parezca un negocio lucrativo, su presencia en la Isla continúa causando serios problemas y por eso los investigadores continúan desarrollando alternativas para erradicar el reptil.
“Estamos destruyendo huevos mensualmente en las Cabezas de San Juan y hemos destruido una enorme cantidad de huevos”, dijo el catedrático.
Esta especie pone en peligro el desarrollo económico de la Isla porque su sola presencia en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín provoca problemas con la salida y llegada de los vuelos. También, la infraestructura de la Autoridad de Acueductos y Alcantarrillados (AAA) se afecta con su presencia, señaló Joglar, quien lleva siete años investigando el comportamiento de la iguana.
Otra de las especies de las que habló Joglar fue el caimán, que llegó a Puerto Rico hace 50 años.
“Hace dos semanas que encontramos el primer nido de caimán aquí en plena zona metropolitana en la laguna San José”, mencionó.
Las expresiones de Joglar fueron en una conferencia de prensa para anunciar el vigésimo séptimo Simposio del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales, el cual se le dedicara a las especies amenazadas, extintas y en peligro de extinción de la Isla.
El mismo se celebrará el 21 y 22 de noviembre en el Centro de Convenciones, Pedro Rosselló en Santurce. Entre otros participaran el Servicio de Pesca y Vida Silvestre, Nature Conservancy, Centro de Ecología Tropical Aplicada y Conservación de la Universidad de Puerto Rico. La entrada es libre de costo.