El Senado aprobó hoy una resolución para investigar si en la Isla hay discrimen en los precios de los artículos y servicios dependiendo del género al que van dirigidos.
En una votación a viva voz hoy fue aprobada la Resolución del Senado 28 del senador José Nadal Power.
Nadal Power señaló que en jurisdicciones de Estados Unidos y Europa se hecho estudios que demuestran que los precios de los productos y servicios dirigidos a las mujeres y niñas tienden a ser más altos que los precios de productos y servicios dirigidos a hombres y niños, sin que existan diferencias en su contenido que justifiquen la diferencia en precios.
“Esta discrepancia en precio se ha denominado alrededor de Estados Unidos como “Pink Tax”, ya que perjudica directamente a las mujeres por comprar productos y servicios mercadeados a ellas. En un estudio reciente realizado por la ciudad de Nueva York, y publicado a finales del 2015, demostró que, en promedio, las mujeres pagan 7% más por artículos mercadeados para mujeres, en comparación con sus equivalentes dirigidos a hombres” explicó Nadal Power.
Nadal Power puntualizó que el segmento que reflejó una mayor discrepancia de precios fue en el de cuidado del cabello, en donde los precios de los productos femeninos eran 48% más alto, en promedio, que sus equivalentes dirigidos a los hombres. Por otro lado, un estudio realizado por el estado de California en el 1996 concluyó que las mujeres gastaban $1,351 más al año por productos y servicios equivalentes a los de los hombres.
“Ya tenemos referencias confiables de la injusticia que se comete contra la mujer hasta en los precios de los artículos de uso general. Desde el 1996, el estado de California estudió el tema y radicó legislación para prohibir el discrimen por precio a base de género. La ciudad de Nueva York y el condado de Miami-Dade en la Florida también han dado ese paso”, aseguró el Senador por Acumulación.
Para ir a un ejemplo concreto, el diario The Washington Post realizó un estudio en su edición digital donde verificaron los precios de los artículos para niños y niñas. Y descubrieron cosas sorprendentes: una ‘scooter’ para niños tenía un precio de $24.99 y el mismo ‘scooter’, con muy pocas diferencias entre sí, estéticas sobre todo, costaba $49.99. Esa es la injusticia que estamos combatiendo ”, explicó el senador.
Nadal Power fue enfático en sus declaraciones al expresar su apoyo a la medida dado lo que se ha descubierto en investigaciones llevadas a cabo en otros lugares, “nos sentimos obligados a asegurarnos de que tales prácticas no se den en Puerto Rico. Con esta investigación buscamos averiguar si en nuestro País existe un patrón de discrimen de precio a base de género. Este estudio no se ha realizado todavía y es esencial conocer cómo se comportan los precios en este aspecto”.
“Las mujeres no tienen que pagar más por el mero hecho de ser mujeres. Aquí no estamos hablando de productos distintos, son ciertamente las mismas versiones, en algunos casos con diferencias de color o de diseño de empaque” enfatizó Nadal Power.
“Nosotros en la asamblea legislativa tenemos una obligación moral de reiterar nuestro compromiso por la igualdad y la equidad de todas las personas en nuestro País. Tras la aprobación de esta resolución si se descubre que existe un patrón de discrimen de precio por parte de negocios en Puerto Rico, vamos a legislar para que eso no suceda más”, concluyó diciendo el Senador.