A casi un mes de que el gobernador Ricardo Rosselló le pidiera la renuncia al alcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill, por un escándalo de acoso sexual, la administración municipal advierte sobre las consecuencias de manifestarse en los predios de la alcaldía.
“La Administración Municipal de Guaynabo advierte sobre el riesgo que representa hacer manifestaciones en los predios de la alcaldía para unos 57 niños de edad preescolar que son servidos en tres salones en el vestíbulo del edificio, durante días y horas laborables”, reza el comunicado de prensa.
Y es que, según la comunicación escrita, hacer manifestaciones dentro y fuera del edificio City Hall de Guaynabo, podrían violentar las siguientes leyes:
“I-Ley #30 del 16 de mayo de 1972 que Prohíbe la entrada o permanencia no autorizadas en las escuelas y otras entidades educativas…
(a)Toda persona que penetre en el edificio o en terrenos de un centro de cuidado infante-maternal, un centro pre-escolar, sin permiso del director o encargado del mismo que habiendo terminado alguna gestión legítima en el edificio o terrenos de dichas instituciones educativas o centros de cuidado de niños anteriormente señaladas, permanezca dentro de ellos después de haber sido ordenado a salir del edificio. Esto aplica dentro y fuera de horas regulares de las actividades educativas de las instituciones y se incurrirá en delito menos grave al no obedecer el requerimiento de un agente del orden público estatal o guardia municipal o cualquier persona encargada de la vigilancia”.
II- Ley #338 del 1998. Carta de los derechos del niño.
El Estado Libre Asociado de Puerto Rico, con plena conciencia de que es su responsabilidad lograr el máximo desarrollo y bienestar de todos los niños del país, declara que todo niño en Puerto Rico, desde su nacimiento hasta los veintiún (21) años de edad, y sin menoscabo a las leyes vigentes, tendrá derecho a:
- A disfrutar un ambiente seguro, libre de ataques a su integridad física, mental o emocional en todas las instituciones de enseñanza, públicas y privadas, a lo largo de sus años de estudios primarios, secundarios y vocacionales hasta donde las facilidades del Estado lo permitan.
“Hacemos esta advertencia en ánimo de salvaguardar la seguridad y tranquilidad de los niños y de los padres que a diario visitan nuestras facilidades”, concluye el comunicado.
En los pasados días varias organizaciones se han manifestado en contra del alcalde, quien se niega a dejar al puesto luego de que el primer mandatario del país le solicitó que dimitiera al puesto. El pedido de renuncia se da luego que trascendiera que O’Neill tranzó por $350 mil en un caso de acoso sexual.
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