El colectivo Nada Santo Sobre Monsanto (NSSM) convocó a los puertorriqueños a unirse a la Quinta Marcha Contra Monsanto y demás semilleras transgénicas en Puerto Rico, a partir de las 10:00 de la mañana frente al edificio federal en Hato Rey.
La actividad, que es dedicada al fenecido periodista Carmelo Ruiz Marrero, quien dedicó gran parte de su vida a educar, investigar y escribir sobre los peligros de los transgénicos con un compromiso incesante con su patria, tiene como propósito denunciar la presencia de los transgénicos en la escala nacional y global.
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“Siempre respetando el derecho de expresión de cada ciudadano, pero recordando la aparente interferencia de parte de infiltrados en el Paro Nacional del pasado 1 de Mayo, NSSM (advierte) que esta marcha es una de índole familiar, educativa y de concientización armónica”, se indicó en la convocatoria firmada por los portavoces Vilma Calderón y Salvador Tió.
Destacron que el pueblo lleva cinco años manifestándose pacíficamente en contra del acaparamiento del sistema global alimentario por parte de las corporaciones semilleras, y este año no será diferente.
“Exhortamos a todas y todos los asistentes a caminar juntos y juntas con amor, solidaridad y paz, exigiendo salud, justicia y sustentabilidad”, se dijo.
Calderón indicó que para asegurar los derechos de las y los ciudadanos y la seguridad en la marcha, el Colegio de Abogados y Amnistía Internacional participan como observadores durante la demostración.
Como es su tradición, la Marcha Contra Monsanto culminará en un mercado agroecológico, para resaltar esta propuesta de transformación social, por lo que los manifestantes tendrán la oportunidad de visitar el establecido en la Placita Roosevelt, coordinado por la Cooperativa Orgánica Madre Tierra, con el fin de darle reconocimiento y respeto a quienes laboran la tierra y le ofrecen comida sana al pueblo.
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En contraste, la ingeniería genética en la agricultura, en manos de grandes corporaciones multinacionales, representa una gran amenaza a la soberanía alimentaria de Puerto Rico y del mundo, agregó Calderón.
“Esta tecnología no solo ha fracasado en resolver los problemas de hambruna y contaminación ambiental, como prometen sus proponentes, sino que promueve el uso desmedido de agrotóxicos en la tierra, el agua y el aire, privatiza las semillas: patrimonio de la humanidad, empobrece y enferma a los agricultores, agricultoras, campesinos, campesinas, sus familias y comunidades y su consumo ha sido vinculada con graves daños a la salud”, proclamaron.
Cientos de pueblos en los seis continentes del mundo estarán marchando esta semana a favor de la vida y en contra de la muerte que promueve Monsanto y las demás semilleras transgénicas, según el colectivo NSSM.
La marcha va dirigida, además de Monsanto, contra Bayer CropScience, DuPont Pioneer, Syngenta, Illinois Crop Improvement, Dow AgroSciences, AgReliant Genetics, y la Asociación de Biotecnología Agrícola de Puerto Rico (Prabia), compañías multinacionales presentes en Puerto Rico y que diariamente experimentan con tóxicos como el glifosato (ingrediente activo en herbicida RoundUp) en gran parte de los mejores terrenos agrícolas del país.
“Hoy también vamos en grande contra la junta de control fiscal, principal aliado de Prabia, entidad que conglomera las corporaciones transgénicas en el país y que vela por sus intereses”, expresó Sanvador Tió.
Advirtió que la junta de control fiscal, a través de la ley Promesa, tiene la potestad de irse por encima de políticas públicas y reglamentos ambientales en el país, por lo que muchos de los terrenos agrícolas, reservas naturales, costas, acuíferos, el aire y las comunidades se encuentran ahora en estado de peligro.
“A fin de cuentas, la junta de control fiscal representa los mismos intereses que la industria de los transgénicos en Puerto Rico y eso se basa en enriquecer a unos pocos a mientras degradan nuestros recursos naturales y la salud de todo un pueblo”, remató Tió.