En la cárcel Las Cucharas, en Ponce, quedó confinado desde anoche Michael Ramos Rodríguez, de 24 años, confeso del asesinato del septuagenario Monserrate Soto Moya, encontrado enterrado el jueves pasado en su residencia del número 23 de la calle Camelia de la urbanización Manuel Corchado, en Isabela.
El esclarecimientos de los hechos se logró gracias a una minuciosa investigación que llevó a cabo el Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Aguadilla, con la cooperación de otras divisiones y personal de la Policía del área.
El ahora imputado confesó el asesinato en medio de un interrogatorio en el que le fueron hechas las advertencias de ley luego de ser confrontado con toda la evidencia que los investigadores del caso tenían en su poder.
También se recuperó el auto Hyundai Elantra del año 2015, y otro tipo de propiedad que el imputado le había robado a la víctima.
El agente Juan C. Pérez, investigador del caso, consultó las pruebas con la fiscal Belinda Brignoni, quien presentó cargos contra Ramos Rodríguez por asesinato en primer grado, ley de armas, vehículo hurtado, escalamiento y destrucción de pruebas.
La jueza Dinorah Martin determinó causa en todos los delitos y le impuso al acusado una fianza de dos millones ocho mil dólares, que no fue cubierta.
La vista preliminar fue pautada para el martes 12 septiembre en el Tribunal de Aguadilla.