Miami Beach permitió hoy el acceso a residentes, dueños de negocio y visitantes, tras el cierre que impuso el Gobierno de la ciudad a raíz del paso del huracán Irma por Florida el pasado domingo y que dejó las vías en malas condiciones.
Poco antes de las 8 horas locales de hoy, cuando se levantaba la prohibición, se observaban filas de autos en las carreteras que conectan la ciudad con la vecina Miami, aunque a partir de esa hora el tráfico dirigido por agentes de la Policía de la ciudad empezó a fluir con normalidad.
Un escenario diferente al que las cámaras de televisión locales mostraron el lunes, cuando miles de vehículos se quedaron atrapados en las autopistas que llegan a la turística Miami Beach tras verse impedidos de volver a sus casas por oficiales, a raíz de la normativa dispuesta por las autoridades locales.
El mismo domingo, tras el paso del huracán Irma, el alcalde de la ciudad, Philip Levine, prohibió el acceso a esta ciudad costera debido a las peligrosas condiciones en que quedaron las vías, bloqueadas por árboles caídos y algunos postes de electricidad.
De acuerdo al municipio local, las playas de estacionamiento públicas empezarán a operar con normalidad a partir de la mañana del miércoles, mientras que algunos parques ya han abierto sus puertas hoy.
Por su parte, la también ciudad costera Sunny Isles, cerrada también a causa de los destrozos ocasionados por Irma, y que ha dejado postes y árboles en el suelo, aun no permite el acceso a residentes, visitantes o dueños de negocio hasta nuevo aviso.