Van 17 días desde que el huracán María tocó suelo boricua, pero en cientos de comunidades sus efectos se sienten como si hubiese sido ayer. No hay duda den el fenómeno cambió la cotidianidad del país y muchos se mantienen en la incertidumbre de si llegarán suministros para sus familias.
Un ejemplo de esto es el sector Seburuquillo, en Lares. Sus residentes ya marcaron el suelo donde esperan que llegue un helicóptero con suministros y agua. “Aquí es todo un desastre. No hay agua potable, no hay comunicación de ninguna clase… Estamos aquí luchando para sobrevivir”, contó a Metro Aurelio Ríos Vargas, quien reside en Lares hace más 17 años.
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Este detalló que la comunidad está compuesta por unas 80 familias. A la fecha el municipio no ha llegado hasta allí por lo que están a merced de cada dos días un helicóptero de Aeroemed, que está trabajando en conjunto con el Coast Guard, FEMA y Fura, llegue con suministros.
Lo único que piden es “agua, comida porque aquí no ha llegado nada del municipio como tal”, aseveró Ríos Vargas.
Ayer a eso de la 1:00 p.m. llegó la nave con agua y alimentos listos para su consumo tipo MRE (Meal ready to eat), la emoción era evidente los adultos subían para ayudar a descargar el helicóptero, mientras que los niños celebraran. Pero los suministros se hacen nada ante tanta necesidad. Eran unas 300 libras de provisiones y el próximo vuelo es el domingo, hasta ese día los residentes del Seburuquillo esperan por agua y comida.
Desde el paso del huracán por la isla Aeromed está trabajando en misiones de entrega de suministros y realizan hasta cinco vuelos diarios a zonas de difícil acceso en el país. Lo más impresionante para el director de la empresa a nivel local, José Hernández, es l”a necesidad humana que hay. Cuando tu ves el desespero de la gente por esa botella de agua o esa caja de comida al final del día tu no miras tu plato de comida o lo que te vas a tomar igual porque te hace más entendido que la única diferencia entre ellos y tu es que tuviste más suerte… Ahora todos aquí somos más cuidadosos en el consumo”.
Hernández, quien trabajó la emergencia del paso de Katrina, expresó que jamás pensó ver a Puerto Rico pasando por algo como esto.
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Respuesta inmediata al llamado
El vuelo a la comunidad estaba programado para las 11 de la mañana, pero eran las 12 del mediodía y no habíamos salido. ¿La razón? El agua que esperaban para el sector estaba en un vagón en camino a la zona metropolitana, pero no sabían la hora de llegada.
Ante esto, este diario se puso en contacto con Supermercados Selectos y fue Ada Piñeiro la propietaria del local en Venus Garden quién de inmediato envió 50 cajas de agua para la comunidad. Estas estarán llegando en varios viajes en estos días.
