Con el objetivo de redoblar esfuerzos, devolverle la salud al ecosistema del Estuario de la Bahía de San Juan y restablecer sus servicios económicos y bajo el lema Estuario Revive, el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan (PEBSJ) reforzó su plan de trabajo de tres meses que comprende monitorear la calidad del agua, reforestar las áreas y apoyar las comunidades aledañas que fueron impactadas por este sistema de fuerza extrema.
Así lo anunció hoy, la directora ejecutiva del Programa, Brenda Torres Barreto. El anuncio se llevó a cabo en la Laguna de Condado junto con la brigada de voluntarios para la remoción y limpieza del litoral de la Laguna.
“Luego de una evaluación preliminar sobre el impacto que tuvo el huracán María en el sistema del estuario; en específico, áreas frecuentadas por el público y áreas con alto valor ecológico, hemos definido un plan de acción agresivo enfocado en tres áreas: monitoreo semanal de la calidad de las aguas, remoción de escombros que se encuentra tapando el alcantarillado y apoyo comunitario de manera innovadora. Invitamos al público a unirse a estos esfuerzos, puesto que requieren de muchas manos y de apoyo económico para costear estos servicios de gran importancia para revivir el estuario de manera sustentable”, informó la Directora.
“El sistema del Estuario de la Bahía de San Juan – a través de sus mangles, ciénagas y canales- fue la primera línea de defensa en el área metropolitana ante este terrible huracán. Logró mitigar el impacto a las comunidades aledañas a los cuerpos de agua que componen el estuario. Sin embargo, su lucha tuvo un costo y nos toca devolverle su grandeza”, añadió.
Ante el colapso de la infraestructura sanitaria y los alcantarillados, los ríos, lagunas, y la bahía fueron impactadas negativamente. Se restablecerá la salud de los cuerpos de agua del Estuario incrementando y extendiendo los esfuerzos de monitoreo de la calidad de las aguas. Este monitoreo no solo informa sobre el progreso de los esfuerzos, sino al público sobre la disponibilidad de los cuerpos de agua para el uso recreativo.
En Programa del Estuario estará sembrando árboles y plantas que detengan la erosión en los ríos y las quebradas para así proteger de la sedimentación. Además, se está trabajando en restaurar los bosques de mangle afectados y en sembrar manglar en zonas desprovistas y por ende expuestas a inundaciones y vientos extremos.
Finalmente, se estarán organizando brigadas de voluntarios para apoyar en las gestiones de revitalización comunitaria a través de la búsqueda de soluciones innovadoras a los problemas de salud ambiental que afectan a los habitantes. Entre las actividades a realizarse se encuentran entrega de filtros de agua y el establecimiento de plantas desalinizadoras en zonas necesitadas de agua potable. En cuanto al manejo de escombros el Programa anunció que las próximas áreas de limpieza serán: Distrito del Caño en Barrio Obrero en San Juan; Barrio Caimito en San Juan; Comunidad de Juana Matos en Cataño; Loíza Aldea en Loíza.
Además, como parte de este esfuerzo, se estará reactivando Cine Estuario en colaboración con el Instituto de Cultura de Puerto Rico. Las fechas y lugares estarán colocándose en las páginas de medios sociales de ambas entidades.
“Para realizar estos trabajos hemos creado un fondo especial para que todos puedan aportar y ser parte de la solución. En estas regiones estaremos movilizando maquinaria pesada y el impacto sería de aproximadamente $100,000. Por esta razón, necesitamos el apoyo de compañías, entes privados y de la ciudadanía”, añadió Torres.
