El gobierno español anunció hoy un plan sin precedentes para destituir las autoridades separatistas de Cataluña, instalar a su propia gente en su lugar y convocar a elecciones, invocando poderes constitucionales jamás utilizados para controlar la próspera región que amenaza con independizarse.
Tras una sesión especial del Consejo de Ministros, el presidente Mariano Rajoy dijo que pedirá al Senado autorización para que ministros del gobierno central asuman las funciones del gobierno catalán, lo que incluye el control de la policía, las finanzas y los medios de prensa públicos.
En un esfuerzo por detener el movimiento independentista liderado por políticos separatistas, Rajoy también pedirá al Senado la semana próxima que le dé el poder de llamar a elecciones regionales, algo que por el momento solo puede hacer el presidente catalán.
En Cataluña reinaba el estupor, incluso entre sectores moderados, y el anuncio provocó bocinazos y cacerolazos en las calles de Barcelona. La alcaldesa Ada Colau, que se opone a la independencia sin un referendo válido con garantías fundamentales, calificó la medida de “ataque grave” a la autonomía catalana.
Políticos del partido separatista de izquierda ERC calificaron la medida de “golpe de estado” para aplastar la autonomía catalana. El vicepresidente de la región, Oriol Junqueras, instó a la población a participar de una marcha de protesta en las próximas horas en Barcelona.
Organizaciones de base en Cataluña que han sido el motor de la campaña de independencia llamaron las medidas “autoritarias” y llamaron a una proclamación inmediata de una república catalana.
El jefe del gobierno catalán Carles Puigdemont, que hablará por televisión más tarde, ha amenazado con convocar a una votación en el parlamento regional ara una declaración explícita de la independencia de España.
Rajoy dijo que aplicará el artículo 155 de la Constitución para “restaurar la normalidad” en el país, que enfrenta su crisis institucional más grave en décadas. Dijo que debería realizarse una nueva elección en Cataluña en los próximos seis meses.
“Aplicamos el artículo 155, porque ningún gobierno, ningún gobierno, de ningún país democrático puede aceptar que se ignore la ley, que se viole la ley, que se cambie la ley”, dijo Rajoy.
Dijo que invocará el Artículo 155 de la Constitución para “restaurar la normalidad” en el país, que enfrenta su crisis institucional más grave en varias décadas. Añadió que se convocará a elecciones en la región lo antes posible.
El Partido Popular de Rajoy tiene mayoría en el Senado y cuenta con el apoyo de algunos partidos opositores para aplastar el intento independentista de Cataluña y mantener la integridad territorial de España.
Otros partidos políticos españoles expresaron también su rechazo.
Pablo Echenique, del izquierdista Podemos, dijo que el gobierno de Rajoy “acaba de suspender la democracia en Cataluña y en España, rompiendo con los consensos y los pactos del 78”.
La crisis constitucional, que ha ido creciendo poco a poco durante años, escaló este mes cuando el gobierno regional de Cataluña afirmó que un cuestionado referendo de independencia celebrado el 1 de octubre le daba base legal para separarse de España.
El Tribunal Constitucional español ha fallado hasta ahora en contra de todas las iniciativas de secesión, incluido el polémico referendo. El sitio web de la corte parecía estar caído el sábado, y una portavoz dijo que se habían visto afectados por vandalismo de origen desconocido.
Las autoridades españolas habían advertido el viernes de posibles ataques informáticos y dijeron que en varios sitios web del gobierno habían aparecido lemas a favor de la independencia de Cataluña.
La vocera del Constitucional indicó que la web del tribunal no funcionaba y que no se había visto comprometida información interna. Habló bajo condición de anonimato en línea con las normas internas.
La consulta se vio empañada por episodios de violencia esporádicos en la operación policial para cerrar algunos centros de votación. El gobierno central afirma que el resultado de la votación carece de legitimidad.
Varios partidos de la oposición han acordado apoyar al gobierno español en la intervención de la autonomía catalana para frenar el proceso independentista.
En tanto, activistas catalanes han llamado a otra protesta el sábado en Barcelona por el arresto de dos líderes pro independencia que son investigados por sedición.