NUEVA YORK — El policía Ryan Nash respondía a un pedido de rutina en una escuela en Nueva York cuando alguien reportó que había ocurrido un accidente en la ciclovía afuera.
Nash corrió y se topó con una imagen espeluznante: Un camión había chocado contra un autobús escolar tras haber arremetido contra la gente que estaba caminando o paseando por la vía peatonal. El conductor del camión esgrimía un par de armas y gritaba.
Nash, de 28 años, le ordenó al individuo soltar las armas, y le disparó.
Fue así como Nash puso fin al ataque ocurrido en la zona baja de Manhattan el martes, pero es muy modesto y no quiere que le digan héroe, dicen las autoridades.
“Es un héroe”, insistió el gobernador del estado de Nueva York Andrew Cuomo. “El Departamento de Policía de Nueva York no está compuesto sólo por sus jefes. Se trata de los hombres y mujeres que están afuera, en las calles, todos los días. Y creo que el oficial Nash es un ejemplo de lo importantes que son, de lo talentosos que son, de lo valientes que son”.
El conductor del camión, identificado como Sayfullo Saipov, en realidad sólo tenía pistolas de balines, dicen las autoridades, pero parecían reales. Según testigos, el agresor gritaba “¡Alá Akbar!”, que quiere decir “Dios es grande” en árabe.
El alcalde Bill de Blasio y otros funcionarios municipales elogiaron a Nash por su serenidad en medio de la presión, y lo calificaron como un hombre sumamente modesto que cree que no hizo nada más que su trabajo normal.
“Lo que él hizo fue extraordinario. Inspiró mucha fe y mucho aprecio hacia nuestra fuerza policial”, declaró de Blasio.
Nash fue llevado al hospital por zumbido en el oído, y fue visitado allí por el comisionado policial James O’Neill.
“Como es típico de un policía de Nueva York, él cree que lo que hizo no fue ningún acto de heroísmo, sino la razón por la cual se incorporó a la agencia”, dijo O’Neill.
Nadie respondió a la puerta en la casa de Nash en Long Island el miércoles. Según vecinos, se mudó allí hace menos de un año y la mayor parte del tiempo la pasaba solo, aunque a veces salía a correr.
“Lo que hizo fue asombroso, evitó que otras personas murieran”, expresó un vecino Dino Cortina. “Es un tipo muy agradable”.
La esposa de Cortina, Margie, dijo Nash pasaba el tiempo solo pero era amistoso.
“Nos sentimos más seguros sabiendo que tenemos como vecino a un héroe”, dijo Margie.