El único oficial del cuartel policiaco de Cabo Rojo que fue hoy, sábado, a trabajar le confirmó a Metro Puerto Rico que en el área oeste las ausencias de miembros de la uniformada han obligado a cerrar dos importante recintos del área.
Tanto el cuartel de Cabo Rojo como la Comandancia de Mayagüez tuvieron que ser cerrados en la noche del viernes y en la madrugada del sábado debido a que la gran mayoría de los policías que cubrían los turnos de 8:00 p.m. a 4:00 a.m. y de 4:00 a.m. a 12:00 p.m. no fueron a trabajar.
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“Es que están enfermos. Eso fue lo que dijeron”, le indicó a Metro Puerto Rico el experimentado oficial Milton Concepción, del cuartel de Cabo Rojo que ubica en la calle José de Diego del municipio.
“Relevé a un compañero que estaba sólo y yo estoy en las mismas. Llegué aquí a mediodía a relevar a otro compañero que se quedó solito en su turno, desde las cuatro de la mañana. Habían cerrado el cuartel para ese turno y hoy el cuartel amaneció cerrado. Yo también llevo solito desde que entré”, explicó Concepción en horas de la tarde de hoy, sábado.
Concepción se notaba compungido ante la situación.
Metro cuestionó si las ausencias realmente era una protesta por el trato que recibe la fuerza policiaca de parte del gobierno estatal, pues se sabe que hay molestia por que no le han pagado las horas extras que le deben a pesar de haber realizado extensos turnos tras el paso del huracán María.
“Relevé a un compañero que estaba sólo y yo estoy en las mismas. Llegué aquí a mediodía a relevar a otro compañero que se quedó solito en su turno, desde las cuatro de la mañana. Habían cerrado el cuartel para ese turno y hoy el cuartel amaneció cerrado. Yo también llevo solito desde que entré”
“Yo creo que están molestos, hasta los altos oficiales. Es que no es fácil trabajar tantas horas y que traten así a uno”, destacó Concepción.
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El veterano oficial –quien espera jubilarse el 29 de diciembre– indicó que en la Comandancia de Mayagüez también sucedió lo mismo. Metro llamó a la Comandancia de Mayagüez buscando confirmar la información, pero nunca contestaron el teléfono.
“No se sabe que va a pasar después del 25 (de diciembre). No se sabe cuántos días van a tomar, porque pues, como es por enfermedad”, expresó con tenue tono de tristeza.
Concepción hizo hincapié en que “este es mi último año, le di mi vida a la Policía y a mi país”.
“Ya el 29 de este mes me voy, no regreso. Me iré a unas eternas vacaciones”, rió a través del teléfono.
“Hice lo mejor que pude hasta el final”, puntualizó el oficial, quien, irónicamente, quizás pase lo que le quede en la Policía con poca o ninguna compañía durante su turno gracias a la desorganización que existe dentro del cuerpo policiaco y a la ineptitud gubernamental que se ha agudizado tras el paso del temporal en septiembre.
Curiosamente, Cabo Rojo –un destino tranquilo, conocido por el turismo que traen sus playas y el sosiego de su población– ha sido recientemente escenario de misteriosos tiroteos.
“No se sabe que va a pasar después del 25 (de diciembre). No se sabe cuántos días van a tomar, porque pues, como es por enfermedad”
Según reportó la semana pasada el diario digital La Isla Oeste, ciudadanos del residencial mayagüezano Santa Rita se encuentran consternados ante los constantes ruidos de detonaciones de armas de fuego que escuchan a diario.
“Tememos por nuestra seguridad. Los disparos son continuos”, dijo a La Isla Oeste una vecina del área que exigió el anonimato por temer represalias.
Según indicó ni la Policía estatal, ni la Municipal hace mucho para atajar la situación.
“Se ha llamado a la Policía estatal al 787-851-2020 y no responden. Se llama a la Policía Municipal de Cabo Rojo y toman la información, pero no pasan a dar rondas de seguridad”, le dijo a La Isla Oeste.
