Mientras aún se desconocen datos adicionales sobre la investigación de las autoridades federales en torno al municipio de Toa Baja, la situación fiscal del ayuntamiento no pinta bien, pues hacen de tripas corazones para cuadrar las finanzas municipales, que se afectaron aún más a raíz del huracán María.
En entrevista con Metro, el alcalde de Toa Baja, Bernardo “Betito” Márquez, reconoció que en el año recién cumplido que lleva al mando de la poltrona municipal, aunque han logrado prevalecer, es una labor de “día a día” el mantener las finanzas a flote. “Los momentos son bien difíciles, pero esto es día a día, y mes a mes. Estamos mirando cómo va la cosa, cómo va presupuestado versus real, cómo nos proyectamos al futuro”, expresó Márquez.
De acuerdo con el alcalde, las proyecciones que tenían tras el huracán era una pérdida de un millón de dólares por concepto de IVU, así como dos millones menos en patentes. No obstante, aclaró que el recaudo de patentes fue mayor a las expectativas.
Aseguró que han logrado mejorías “usando responsablemente cada dólar que llega al municipio a través de lo cual pudimos recortar un 25 % del presupuesto, que estaba sobrestimado”. De hecho, el municipio tenía una reducción de jornada laboral, pero fue eliminada hasta junio próximo. Márquez no descartó que puedan volver a establecerla, depende la situación fiscal futura.
El Negociado Federal de Investigaciones (FBI, siglas en inglés) ha visitado el municipio en sobre cinco ocasiones para requerir información sobre el ayuntamiento. Sin embargo, al momento se mantiene en misterio el estado de esa investigación. El alcalde señaló: “Por lo menos no tenemos conocimiento de que hayan llegado acá, así que no sabemos en qué estatus están, porque realmente los huracanes Irma y María detuvieron al país y ahora es que estamos recuperándonos y poniéndonos de pie poco a poco. Hay trabajo como loco, así que no sé por dónde camina el Gobierno federal. Ellos tendrán su agenda y ellos sabrán”.
Márquez recordó que cuando llegaron al municipio solo había $39 mil en caja, al 10 de enero del año pasado cinco días antes de tener que pagar $686 mil en nómina. Tampoco había estados financieros auditados, necesarios para acceder a fondos federales. Actualmente, el municipio lidia con un déficit de $25 millones.
Millones en daños por María
Esta es la realidad con la que lidia la administración mientras también trabajan para recomponer el ayuntamiento tras el fenómeno atmosférico. Explicó que ya alcanzaron el 100 % del servicio de agua potable, y el 95 % de la primera fase de recogido de escombros, por lo que ya comenzaron la segunda fase. Sobre la energía eléctrica, alcanzaron un 80 %, que, según el alcalde, está avanzado en comparación al 60 % del que se habla en el resto del país.
Contrario a las declaraciones de la Federación de Alcaldes, que había dicho que Márquez firmó el acuerdo de alcaldes con el Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), el ejecutivo municipal dijo a Metro que no lo firmó porque considera que ha habido una comunicación efectiva con el personal de la AEE. En cambio, firmarlo sería más oneroso para el ayuntamiento, que de por sí no tiene los recursos económicos, según dijo.
A raíz de los daños ocasionados por el huracán, que dejó $350 millones en pérdidas generales y $60 millones en daños a infraestructura municipal, el alcalde señaló que urge la canalización del río La Plata, una de las razones que provocó inundaciones de hasta doce y catorce pies de agua. Se estima que 16 mil personas tuvieron daños parciales o totales en sus residencias.
En busca de fondos nuevos
Una de las apuestas del municipio es a adquirir dinero nuevo a través del desarrollo de proyectos existentes.
Para esto, solicitan al Gobierno la transferencia de Isla de Cabras y el balneario Punta Salinas, de Parques Nacionales al municipio. Incluyendo a Palo Seco, persiguen desarrollar industrias turísticas.
A la par, desarrollan un proyecto con la Autoridad de Carreteras para establecer un paseo lineal a una inversión de $1.7 millones.
