PARÍS — Fiscales franceses presentaron cargos preliminares el jueves contra la dirigente de ultraderecha Marine Le Pen por tuitear imágenes de actos brutales del Estado Islámico, en un nuevo revés para una mujer considerada en Europa la vocera del populismo antiinmigrante.
La fiscalía de Nanterre, un suburbio de París, dijo que se presentaron los cargos por “difusión de imágenes violentas”. Si el caso llega a juicio y se la declara culpable, Le Pen enfrentaría hasta tres años de prisión y multas por 75.000 euros (90.000 dólares).
Los tuits de Le Pen en diciembre de 2015 mostraban a los extremistas del grupo conocido también por las siglas ISIS efectuando ejecuciones, incluso la del periodista estadounidense James Foley. Los publicó luego de los ataques de ISIS en noviembre de 2015 al acusar al gobierno de no tomar medidas suficientes para proteger al país.
Le Pen no hizo declaraciones públicas sobre los cargos, presentados después que el parlamento francés la despojó de su inmunidad. Su abogado Rodolphe Bosselut tampoco quiso hacer declaraciones.
En un caso de gran repercusión, se les acusó de usar a empleados del Parlamento Europeo, cuyos sueldos son pagados por la UE, para sus actividades partidarias, algo que ella niega.
El Frente Nacional está en crisis desde que Le Pen perdió en las elecciones presidenciales del año pasado. Ella planea proponer un cambio de nombre para el partido en el congreso que se celebrará en las próximas semanas, aparentemente para distanciarlo de problemas y estigmas del pasado. El congreso también podría anular la presidencia honoraria de Jean-Marie Le Pen, fundador del frente y padre de Marine Le Pen, como parte de un prolongado enfrentamiento familiar.
El discurso de Marine Le Pen, nacionalista e islamófobo, tuvo amplia repercusión tras la elección de Donald Trump y el triunfo del Brexit. Pero en las elecciones de mayo de 2017 el centrista proeuropeo Emmanuel Macron se impuso por amplio margen.