En plena contienda por la presidencia del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico (CMCPR), Metro recibió un documento con denuncias de un alegado despilfarro de dinero en la administración del organismo y su presidente, el doctor Víctor Ramos. La fuente del documento aseguró haber investigado el estado de las arcas fiscales de la institución que ha dirigido el galeno por los pasados cuatro años.
De acuerdo con la fuente, “tan pronto el doctor Ramos ganó la presidencia del Colegio en 2014, se comenzó a despilfarrar el dinero de la institución, haciendo contrataciones que no estaban acorde con el ritmo de ingresos”. Se alegó que el colegio contaba con un súperavit de $2 millones, que fue desgarrándose. Sin embargo, en entrevista con Metro, el doctor Ramos negó los señalamientos.
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“No había ningún sobrante de dinero cuando yo llegué [al Colegio]. El doctor Eduardo Ibarra, cuando presidía el Colegio, no le pasaba un centavo a los distritos y no solo utilizaba el dinero que le correspondía al Colegio a nivel central, sino que utilizaba las cuotas que les correspondían a los distritos y a los cuerpos”, apuntó Ramos.
“La firma Politank cobra exactamente la misma cantidad de dinero que cobraban los asesores principales legales del Colegio toda la vida, ni más ni menos”, afirmó el actual presidente, al tiempo que negó la existencia de un contrato aparte con el licenciado Domenech. “No hay ningún contrato de asesoría personal”, aseguró.
“Si utilizabas los chavos tuyos, además de los chavos del distrito, pues creabas una falsa impresión de que tenías esta gran economía”, expresó.
De la información que llegó a este medio se desprende, además, la contratación de los servicios de la firma de cabilderos Politank, fundada por el licenciado Francisco Domenech —quien, a su vez, fue quien dirigió la campaña para la presidencia de Ramos en el CMCPR—, por la suma de $9,500. Alegadamente, Domenech obtuvo por separado un contrato de $7,500 mensuales, por asesoría directa al presidente del Colegio. Se señala, también, que la licenciada Verónica Ferraiouli, esposa de Domenech, obtuvo un contrato para servicios legales, con cuantías mensuales que rondan entre los $10,000 a $25,000.
“La firma Politank cobra exactamente la misma cantidad de dinero que cobraban los asesores principales legales del Colegio toda la vida, ni más ni menos”, afirmó el actual presidente, al tiempo que negó la existencia de un contrato aparte con el licenciado Domenech. “No hay ningún contrato de asesoría personal”, aseguró.
Sobre el contrato de la licenciada Ferraiouli, dijo que la abogada sí tiene un contrato como litigante en el tribunal cuando el Colegio enfrenta casos y que, en efecto, la cuantía que cobra mensualmente varía de mes a mes, dependiendo de la cantidad de casos. “Cuando no hay casos, su facturación es 0”, indicó, al tiempo que dijo que Ferraiouli sí pudo haber llegado a cobrar hasta $20 mil en un mes, “atendiendo seis casos a la vez, con seis vistas a la vez en el tribunal ese mismo mes”.
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Ramos negó que hubiese un conflicto con la contratación de Ferraiouli por ser la esposa del licenciado Domenech —quien también dirige su campaña actual por la reelección como presidente del Colegio—, y argumentó que la abogada “no ha perdido ni un caso, así que a mí me interesa que mi abogado sea bueno y gane los casos y ahí está el récord”.
Ramos también negó alegaciones de que el exsenador, Kenneth McClintock haya contratado por separado con el Colegio. Indicó que el exsenador formó parte de la firma Politank y que debió haber recibido un pago por sus servicios dentro de la firma. “Solo son mentiras tras mentiras”, dijo el actual presidente sobre los alegados contratos.
El documento también apunta a que el profesor de Derecho y analista radial Carlos Díaz Olivo, es asesor legal del Comité de Ética. No obstante, Ramos argumentó que dicho Comité es autónomo y que Díaz Olivo cuenta con ese contrato desde que el doctor Ibarra fungía como presidente.
“En cada Junta hay que reaprobar los contratos, pero esto es un contrato que lo administra un comité autónomo dentro del Colegio. Los miembros [del Comité] han cambiado, pero siempre han decidido tener la misma representación legal”, expresó.
Ramos aseguró que, en la cuenta del Colegio, hay más de $3 millones actualmente y que, al sumar las cuentas de los distritos y cuerpos, la cifra total ronda los $5 millones. Además de la cuenta principal de la institución, cada uno de los nueve distritos del Colegio tiene una cuenta, así como la Fundación Médica, el Fideicomiso de Ayuda al Colegiado, el Senado Médico y el Comité de Ética.
La fuente denunció, además, el pago de $15 mil mensuales de alquiler por instalaciones rentadas por el Colegio, luego de la demolición de la sede, que estaba salda. En ese proyecto supuestamente se gastó más de un millón entre maquetas, planos, estudios de ingeniería y viabilidad de construcción de una nueva sede bajo un estimado de $7 millones, un proyecto que nunca vio la luz. Finalmente, se vendió el terreno en $250 mil, según alegó la fuente.
Bajo el mandato de Ramos, el Colegio adquirió un edificio en Río Piedras por la suma de $1.4 millones y se hizo un préstamo por $800 mil para la remodelación. El presidente aseguró que los costos totales estuvieron por debajo de los estimados que se hicieron, incluso bajo otras administraciones —que rondaban entre $5 millones y $8 millones— y que la moción para la construcción o adquisición de una nueva sede estaba aprobada desde la incumbencia de su predecesor.
En otro giro por la contienda, el doctor Carlos Mellado, quien también aspira a la presidencia anunció ayer en sus redes sociales que cursó una carta al Comité de Nominaciones y Elecciones para garantizar la “pureza” de las elecciones pautadas para el próximo 22 de abril.
La campaña de ambos galenos tiene fuerte presencia en las redes.