WASHINGTON — El gobierno estadounidense sancionó el viernes a siete oligarcas y 17 funcionarios de gobierno rusos por lo que Estados Unidos llama las “actividades malignas” de Rusia en el mundo, en un intento por demostrar que el presidente Donald Trump no es excesivamente indulgente con el Kremlin.
El Departamento del Tesoro dijo que 12 empresas de propiedad de los oligarcas son igualmente objeto de sanciones junto con una empresa estatal que comercia armas y un banco subsidiario. Altos funcionarios del gobierno en Washington dijeron que las sanciones eran parte de un esfuerzo concertado y en curso por parte de Estados Unidos por obligar al gobierno del presidente Vladimir Putin a retroceder. Destacaron que desde la juramentación de Trump el año pasado, se ha sancionado a 189 personas o entidades relacionadas con Rusia.
Trump evita criticar directamente a Putin y últimamente invitó al mandatario ruso a reunirse con él, posiblemente en la Casa Blanca. Con todo, en las últimas semanas, Washington ha aplicado una serie de medidas, tanto diplomáticas como económicas, para presionar a Putin y su círculo. “Nadie ha sido tan duro con Rusia como yo”, dijo Trump en conferencia de prensa el martes.
Las sanciones no responden a un hecho en particular sino a “la totalidad del patrón persistente y cada vez más descarado del gobierno ruso”, dijeron los funcionarios norteamericanos, que hablaron bajo la condición reglamentaria de anonimato.
Las actividades de Moscú que provocaron las medidas estadounidenses incluyen las agresiones en la península de Crimea y el este de Ucrania, el apoyo al presidente sirio Bashar Assad, los ataques informáticos y los intentos de subvertir la democracia occidental, dijeron los funcionarios.
No hubo respuesta del gobierno ruso por el momento.
Muchos de los sancionados son individuos y empresas relacionados con el sector energético, incluida la estatal Gazprom. Los funcionarios dijeron que el objetivo era demostrar que quienes se han beneficiado financieramente con el poder de Putin pueden ser objeto de sanciones.
La lista de sancionados incluye:
—Kirill Shamalov, quien según trascendidos es el yerno de Putin, casado con su hija Katerina Tikhonova, aunque ni Putin ni el Kremlin han reconocido que ella sea hija de Putin.
—Igor Rotenberg, hijo de Arkady Rotenberg, amigo de Putin desde la adolescencia.
—Andrey Kostin, titular del segundo banco del país, el VTB, controlado por el Estado.
—Alexei Miller, jefe de Gazprom, la gran empresa estatal de gas natural. Miller y Kostin son miembros del equipo íntimo de Putin.
Uno de los magnates incluidos es Oleg Deripaska, quien figura en la investigación sobre la injerencia rusa debido a sus vínculos con Paul Manafort, exdirectivo de la campaña presidencial de Trump.