El Gobierno aseguró que un modelo de alianza público‑privada RDBFMO —siglas en inglés para reparar, diseñar, construir, financiar, mantener y operar— es la manera más efectiva para que la Autoridad de los Puertos de Puerto Rico (APPR) consiga una mejor infraestructura, esto luego de que el gobernador Ricardo Rosselló Nevares diera a conocer el Estudio de Deseabilidad y Conveniencia de los terminales de cruceros en Puerto Rico.
El primer ejecutivo destacó que el estudio perseguía determinar las necesidades de servicio de los terminales de crucero para los residentes y turistas de Puerto Rico; analizar las varias opciones para obtener esas necesidades de servicio; y seleccionar la más eficiente de esas opciones.
“Los terminales de cruceros son esenciales para la economía de Puerto Rico. Se espera que la optimización de los terminales de cruceros mejore las condiciones económicas en la Isla, incrementen las actividades turísticas y promuevan desarrollo económico y creación de empleos”, comentó el primer mandatario. Rosselló Nevares abundó al explicar que “para conseguir estas metas, es necesario que se invierta capital privado en los terminales, para llevarlos a estándares de clase mundial y reparar daños causados por el huracán María”.
Empresa privada tendrá derecho de ingresos de las líneas de crucero
Por su parte, el director ejecutivo de la APPR, Anthony Maceira Zayas, explicó que “este tipo de P3 incluiría reparaciones específicas requeridas para llevar a los muelles a un nivel óptimo de operación, diseño y construcción de nueva infraestructura en los muelles existentes. Además, le traspasaría el riesgo de operación y mantenimiento a un socio privado”.
“La P3 sería con riesgo de ingreso, ya que el socio privado tendría derecho a los ingresos de las líneas de crucero y a otros ingresos. No obstante, es de esperarse que la P3 incluya alguna combinación de un pago adelantado del socio privado a la APPR o de pagos sobre la marcha del socio privado a la APPR”, añadió Maceira Zayas.
Entre las necesidades de servicio específicas que se identificaron para considerar en el estudio figuraron apoyar el desarrollo económico y la creación de empleos por medio del turismo; mejorar la infraestructura de los terminales turísticos; y balancear las necesidades de los terminales y pasajeros de cruceros con los otros usos de la bahía.
También se consideraron entre las necesidades mejorar la posición financiera de la APPR y el acceso de fondos para otros proyectos; así como preservar el medioambiente natural único de Puerto Rico.
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