A pesar de que el servicio de energía eléctrica ha llegado a las comunidades de Vega Baja, la escuela Manuel A. Martínez Dávila, del barrio Pugnado Afuera, aún sigue a oscuras cuando faltan pocos días para el inicio del nuevo año escolar.
El plantel, localizado en la carretera PR-155 atiende a una matrícula de 600 estudiantes de kínder a octavo grado y aunque es receptora, no ha recibido la atención del Departamento de Educación (DE) en términos de mantenimiento y seguridad, señaló el alcalde Marcos Cruz Molina.
Además, luego del paso del huracán María, vándalos provocaron daños particularmente en el sistema eléctrico. De ahí que el plantel está a oscuras casi a inicios del año escolar. Ante la situación, el alcalde atendió el caso personalmente al recibir una carta de la directora del plantel, quien solicitó ayuda para buscar las maneras de acelerar el proceso.
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“Esta escuela fue visitada por oficiales de la Oficina para el Mejoramiento de las Escuelas Públicas (OMEP) y de la Agencia Federal para Manejo de Emergencias (FEMA). Supuestamente se iba a resolver la situación, pero al día de hoy ninguna de las agencias ha logrado su cometido”, detalló el ejecutivo municipal.
Agregó que el municipio seguirá colaborando “en todo lo que podamos, pero la responsabilidad primordial recae en el DE. Recordemos además que el gobierno central ha seguido recortando recursos a los municipios y sumándole más cargas. Cada cual tiene que cumplir con su parte. Nuestra posición es de colaboración”.
Informes de prensa divulgados ayer señalan que la secretaria de Educación, Julia Keleher, admitió que de los maestros regulares reubicados, 550 han reportado dificultades con los cambios. Mientras, faltan 18,000 estudiantes por confirmar a qué escuela asistirán cuando inicien las clases el lunes 13 de agosto.
