La Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR) hizo pública la queja de numerosas madres y padres de niños del programa de Educación Especial que manifestaron que sus hijos no tendrán salones para el servicio que se estipuló en el Programa Educativo Individualizado (PEI) al iniciarse el año escolar.
Según la FMPR, de acuerdo con las normas del propio Departamento de Educación, en el PEI se establecen los servicios educativos y relacionados que habrán de constituir el programa educativo del niño o joven por un periodo no mayor de un año.
Artículos recomendados:
Además, la organización señaló que al principio del año escolar “todo estudiante del PEI con impedimentos debe contar con un Programa Educativo Individualizado vigente”.
Teresa Vélez Rolón, dirigente de la Federación de Maestros y maestra de Educación Especial, indicó que la agencia se dirige a incumplir su obligación con esta población estudiantil.
“Este es el caso de la escuela San Vicente de Vega Baja. Ante el cierre de escuelas aledañas, la matrícula actual ha creado hacinamiento, provocando que los salones de Educación Especial sean eliminados para acomodar grados regulares en espacios diminutos para 25 o más estudiantes. Esto es una clara violación a los derechos de los estudiantes con diversidad funcional que incluye estudiantes con pérdida auditiva”, señaló.
Añadió que “se están violentando las propias directrices del DE, el cual ha estipulado que en las organizaciones escolares, los salones de educación especial tendrán prioridad. Los padres han señalado que radicarán querellas por estas violaciones”.
La FMPR indicó que no se les está ofreciendo a estos niños una educación individualizada como requieren sus condiciones.
Tampoco, afirmó la unión, les ofrecen salones adecuados para los servicios educativos según sus necesidades.
“Incluso están dividiendo los salones por la mitad ante el exceso de estudiantes y grupos, creando un problema de hacinamiento en la escuela”, dijo la líder federada.
Para Vélez Rolón, “la secretaria de Educación, Julia Keleher, y el Departamento de Educación, atentan una vez más contra los estudiantes con necesidades particulares, llevándolos a condiciones que no les permitirán su óptimo desarrollo. Hacemos un llamado a Eliezer Ramos, de la Secretaría de Educación Especial, a que imparta directrices a los efectos de que los niños con diversidad funcional tienen derechos no un privilegios”.
