Rogerio Luiz De Souza Correia, es un brasileño que vive en Sydney. La justicia perdonó una violación porque él contactó a su víctima a través de la famosa aplicación Tinder.
Esta es una app que se ha popularizado desde hace muchos años, que logra emparejar a varias personas ya sea para tener relaciones sexuales o para encontrar pareja.
Rogerio fue también absuelto de otros seis cargos menores de asalto sexual, puesto que argumentó “tenía derecho” por el tipo de aplicación.
Su víctima fue una mujer de 29 años que no ha querido revelar su identidad. Tomaron unas copas en un bar y ella lo invitó a su departamento. Ahí él aprovechó para violarla, ignorando que ella repetía continuamente que no quería y mientras lo separaba desesperadamente.
La defensa del victimario
“Nos besamos en el suelo de la cocina”, explicó “pero no tenía una erección. Antes de que me diera cuenta ella se levantó y se fue”.
Él jamás se dio cuenta que había sido una violación.
“Para él, no había nada fuera de lo normal, todo era consentido” dijo su abogado. Él hasta sacó una foto del recuerdo.
La mujer tuvo que ir directamente al hospital en donde encontraron moretones. Sin embargo, el jurado aún así dictaminó que no había suficientes pruebas y lo dejó en libertad.
Estos casos continúan ocurriendo. Mujeres que tienen toda la evidencia de un asalto sexual y aún así dan el fallo a sus victimarios.