El representante novoprogresista Michael Abid Quiñones oficializó el domingo su aspiración para la alcaldía de Lares en un evento en el Potrero Morales en la carretera PR-129 de ese pueblo, con lo que se presenta como retador de Carlos Roberto Pagán, hijo del actual alcalde, Roberto Pagán.
“Pueden ver que esto se llenó total. Aquí la gente no cupo, se llenó afuera. Aquí se celebró el anuncio del hijo del alcalde, con el alcalde, con toda la maquinaria municipal y hoy triplicamos la cantidad de gente que ellos tuvieron. Eso es una señal muy clara de que la gente agradece a Roberto Pagán los años de servicio que le brindó a nuestro pueblo pero ya es tiempo de una nueva generación y una nueva visión en el pueblo de Lares”, dijo Quiñones a la Red Informativa.
El actual alcalde de Lares había anunciado que se retiraría del cargo en enero pasado pero su salida no se ha producido. Según se ha informado, Pagán señaló que fue por un mensaje de Dios que supo que tanto él como su hijo serían alcaldes de la ciudad.
“Él dijo que antes de junio habrá un nuevo alcalde. Para eso tuvo que haber renunciado 60 días antes para que se celebren las primarias. Esperamos que no le falle al pueblo con las expresiones que hizo”, acotó Quiñones al adelantar ya tiene un plan de caminatas y visitas.
Asimismo, dijo no tener nada personal contra Pagán ni su hijo. “Los puestos no se heredan, los puestos se trabajan… Esto hay que ganárselo, hay que sudarlo. Hay que escuchar la voz de la gente siempre”, agregó quien alegó haber ganado en las pasadas elecciones por 3 mil votos.
Sin embargo, Quiñones no quiso comentar sobre el alegado endoso del gobernador, Ricardo Rosselló y del presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz. “Vamos a esperar que el alcalde renuncie y eso se va a contestar solo”, dijo.
De otra parte, Quiñones denunció que, según la información que tiene a la luz de una resolución de investigación que radicó, es que el alcalde supuestamente no ha seguido las recomendaciones que hizo el Departamento de Salud (DS) sobre el manejo de entierros y fosas en el cementerio municipal luego de los daños que causó el huracán María.