La Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) pagará $481,589 a la empresa encargada de disponer de los diez millones de botellas de agua expiradas que trajeron en respuesta a los huracanes Irma y María, pero que no distribuyeron hasta estas fechas. Ya vencidas, las regalan en Dorado.
La empresa Puerto Rico Drilling “solo recibirá el pago una vez pueda evidenciar que el trabajo se completó”, precisó el portavoz de FEMA en Puerto Rico, Juan A. Rosado Reynés. En declaraciones anteriores dirigidas a este medio, Rosado Reynés explicó que “el contrato requiere que Puerto Rico Drilling & Supplys, Inc. disponga del agua y recicle las botellas vacías de acuerdo con todos los reglamentos locales, estatales y federales, incluyendo las directrices de la EPA”. Sin embargo, la empresa no tiene un plan concreto para recuperar las botellas más allá de esperar que los vecinos las entreguen voluntariamente.
El acuerdo tiene un término de 33 días y entró en vigor el 8 de marzo, aunque FEMA advirtió que “puede prolongarse durante un tiempo”. El contratista también debe presentar un informe semanal detallando los adelantos.
Reiteran advertencia por salud pública
El planificador Félix Aponte llamó la atención de que el Departamento de Salud es la agencia responsable por supervisar la potabilidad del agua. El científico coincidió con otros expertos entrevistados por Metro en el sentido de que las aguas embotelladas expiradas pueden resultar dañinas a la salud si se ingieren.
“Todos los plásticos sintéticos se producen por derivados de petróleo. Esa molécula es una molécula rígida. Para que tenga flexibilidad y se pueda moldear, se le agrega ácido tánico que tenga flexibilidad, y eso es todos los plásticos. Esos derivados de ácidos tánicos son solubles en agua y son altamente peligrosos”, explicó Aponte. Destacó que, en jurisdicciones como California, se regula la concentración de ácidos tánicos para que no excedan concentración por volumen de agua. Esto podría ser dañino, por ejemplo, para la tiroides.
Ayer mismo, telenoticiarios (WAPA TV) acudieron a Dorado donde encontraron, al igual que Metro, gente llevándose el agua y afirmando que se la tomarían.
“El otro problema es cómo y donde se almacenó. Si estuvo expuesta al sol, el componente ultravioleta provoca o acelera la disolución de las moléculas que forman el plástico en el agua. Podría ser un riesgo de salud pública si no se hace la advertencia de que el agua solo se use para inodoros y nunca para ingerirla”, sostuvo Aponte. Metro PR
Te recomendamos este video:
This browser does not support the video element.