A pesar de que existen un sinnúmero de entes de fiscalización gubernamentales, el gobierno de Puerto Rico no cuenta con un modelo de fiscalización confiable. En cambio, son los medios de comunicación quienes se han dado a la tarea de revelar los esquemas de soborno, corrupción y abuso de poder.
A esa conclusión llegaron varios expertos en comunicación y periodistas quienes constataron la importancia del periodismo, para denunciar que la fiscalización no se puede dejar en manos de agencias del gobierno como la Oficina de Ética Gubernamental, Oficina del Fiscal Especial Independiente y el Departamento de Justicia, por mencionar algunas.
“El periodismo como herramienta de fiscalización es fundamental. Sin este tipo de periodismo no pasa nada. Cuando no tenemos evidencia de los males que se dan en la sociedad, no hay cambio y todo se queda en demagogia y muchas veces las personas en el poder se salen con la suya”, manifestó la periodista Omaya Sosa Pascual.
Sosa Pascual es cofundadora del Centro de Periodismo Investigativo de Puerto Rico (CPI), entidad que hizo público el controvertible chat en el que participó el gobernador Ricardo Rosselló, que causó una indignación colectiva en la isla, a tal grado que el pueblo permaneció en protestas durante las pasadas semanas, exigiendo su renuncia.
Para el profesor Mario Roche, el periodismo de investigación es aquél que revela algo oculto a la ciudadanía y devela prácticas ilegales. “El hecho de que la prensa fue quien puso el foco de asuntos que por la naturaleza deberían ser atendidos por el Departamento de Justicia, es realmente grandioso”, dijo Roche.
Agregó que el periodismo está viviendo un momento glorioso y comparó la pieza de investigación a la altura de publicaciones relacionadas a los sucesos del Cerro Maravilla, el esquema de corrupción del execretario del Departamento de Educación, Víctor Fajardo y en tiempos más recientes, Tus Valores Cuestan.
“El público hoy día le da más credibilidad a los medios de comunicación que se han dedicado a hacer estas divulgaciones, que a las propias agencias de gobierno”, manifestó por su parte la periodista Aixa Vázquez, vicepresidenta del El Overseas Press Club (OPC) quien catalogó la labor del CPI como extraordinaria.
“Cuando hablamos de revolución siempre hablamos de países extranjeros, nunca en Puerto Rico se había pensado que, en dos semanas, el puertorriqueño que no se caracteriza por ser un país que se levanta”, añadió la periodista de Noticentro, Wapa TV, sobre a la reacción que ha causado la publicación de la investigación en la sociedad boricua.
La periodista de Jay y sus Rayos X, Valeria Collazo también se sumó a las voces a favor de más espacios de periodismo investigativo. “Precisamente, ahora estamos viendo cuán importante es, mucho de lo que está pasando ahora, las protestas que han surgido a raíz de la divulgación de información”, expresó Collazo.
Collazo apuntó que una gran cantidad de las investigaciones que transmiten al aire provienen de ciudadanos disgustados con las gestiones que realizan las agencias pertinentes. “Acuden a esas oficinas y no pasa nada. No es hasta que nosotros como periodistas transmitimos lo que nos relatan que es que vemos arrestos y consecuencias contundentes”, añadió Collazo.
“Nadar contra la corriente, en un momento cuando el público que consume las noticias no necesariamente lo hace porque tiene interés sino porque sus amigos los hace es una tarea difícil. Es decir, hacer periodismo de fiscalización hoy día es más difícil porque hay que convertir en viral un contenido de alto interés público para que acapare la atención de la audiencia”.