MADRID (AP) — Activistas de todas las edades y de distintas partes del mundo exigieron el viernes acciones concretas contra el cambio climático por parte de líderes y negociadores que asisten a una cumbre mundial en Madrid.
La marcha estuvo encabezada por decenas de representantes de pueblos indígenas de Latinoamérica, una muestra de respeto luego de que las protestas antigubernamentales en Chile, el anfitrión original de la cumbre, provocaron que las negociaciones se trasladaran a Europa por tercer año consecutivo.
La activista climática Greta Thunberg declaró desde un escenario que “el cambio no va a venir de la gente que está en el poder, va a venir de las masas”. La multitud respondió coreando: “¡Greta! ¡Greta!”.
Los organizadores afirmaron que 500.000 personas habían asistido a la marcha, pero las autoridades de Madrid colocaron el número en 15.000 sin una explicación inmediata de la disparidad.
La adolescente sueca pasó su primer día en Madrid seguida por un montón de cámaras y reporteros, así como de miembros curiosos del público que querían tomarle un video con sus teléfonos, desde el primer paso que dio cuando llegó a la capital española luego de viajar durante la noche en tren desde Lisboa.
Dos jóvenes activistas se ganaron los aplausos de los asistentes cuando subieron a un puente y colgaron una pancarta que decía: “Sólo 8 años para 1,5 grados Celsius. ¿Cómo se atreven?”, esto en referencia a las previsiones de los científicos del aumento en las temperaturas del planeta y de lo que los activistas señalan como una falta de una respuesta política convincente ante la amenaza.
La aglomeración de la gente que trataba de dar un vistazo a Thunberg provocó que se retirara al poco tiempo de que inició la marcha, diciendo que la policía le había aconsejado abandonar el evento por cuestiones de seguridad, y se subió a un auto eléctrico.
Una portavoz de la policía de Madrid, que habló bajo condición de anonimato debido a que no estaba autorizada a ser nombrada por los medios, dijo que sólo le habían “sugerido” a Thunberg abandonar el sitio luego de que parecía “abrumada” por la atención, y que la policía nunca ordenó a la activista salir por cuestiones de seguridad.
Horas antes, la joven de 16 años dijo en una conferencia de prensa que las exigencias para una acción real contra el cambio climático seguían siendo “ignoradas” por los líderes políticos pese a sus continuos elogios al movimiento juvenil ambiental que ha alcanzado una escala mundial y el cual ella ayudó a crear.
Thunberg esperaba que la COP25, una cumbre climática auspiciada por la ONU, conduzca a “algo concreto” y a una “mayor concientización entre la gente”, pero señaló que después de más de un año de manifestaciones estudiantiles, “todavía básicamente no ha pasado nada”.
“La crisis climática sigue siendo ignorada por aquellos que están el poder”, manifestó.
Durante la cumbre que se celebrará del 2 al 13 de diciembre, se prevé que casi 200 países modernicen las normas en torno a los mercados mundiales de carbono y se pongan de acuerdo en cómo los países empobrecidos deberían ser compensados por la destrucción ocasionada en gran parte por las emisiones de las naciones ricas.
Un funcionario que participó directamente en las negociaciones dijo que, pese a unos cuantos retrocesos, las negociaciones técnicas estaban progresando, aunque se están dejando fuera muchas cuestiones para ser tratadas durante unas reuniones a nivel ministerial que se realizarán en la segunda y última semana de la COP25.
El funcionario pidió hablar bajo condición de anonimato por la delicadeza de las discusiones.