Una abuela, una nieta y un nieto llegaron anoche al Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot para cumplir un sueño: ver juntos a Daddy Yankee en concierto.
Francisco López y su hermana Jaritza llegaron al Coliseo desde Hatillo, del Barrio Pueblo, para ver al Big Boss con María Magdalena Cruz, de 78 años, quien aseguró ser una fiel seguidora de Yankee desde que tiró la Gasolina.
“Ir a un concierto de reguetón con mis nietos es la emoción más grande del mundo”, aseguró la abuela. “La fiebre comenzó desde la canción de la Gasolina. Me impactó por unas premiaciones en las que bajó en un carro y desde ahí lo seguí”, añadió.
El nieto explicó en detalle cómo fue que logró que la abuela se contagiara con el perreo. Aclaró que ella no le da “hasta abajo”, pero que respeta a los mortales que sí lo hacen.
“Ella no lo baila, pero lo goza. Mamá y yo hemos sido fanáticos porque de pequeño yo veía a Yankee en la televisión con ella. Y fuimos a ver la película juntos. Siempre ha sido un artista con el que ella ha simpatizado y queríamos cumplir el sueño de verlo en vivo juntos”, dijo emocionado.
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La abuela comparó a Daddy Yankee con Chayanne, porque “levanta pasiones” y “por su simpatía”. La última vez que doña María fue al Choli fue, precisamente, para ver a su galán sanlorenceño, Elmer Figueroa Arce. Su nueva meta es conocer en persona a Daddy.
