Joe Biden se apuntó el sábado una rotunda victoria en las elecciones primarias demócratas de Carolina del Sur con el apoyo del electorado afroestadounidense para poner fin a la racha ganadora del progresista Bernie Sanders.
El triunfo de Biden llegó en un momento crucial de su campaña mientras el demócrata moderado se recuperó de decepcionantes resultados en Iowa, Nueva Hampshire y Nevada. La contienda se dirige de inmediato al “Súper Martes” de la próxima semana, fase en que electores de 14 estados acuden a las urnas y en la que está en juego un tercio de los delegados necesarios para obtener la candidatura presidencial demócrata.
“Seguimos con mucha vida”, declaró Biden en un exuberante evento tras la contienda en Carolina del Sur. “Para todos aquellos que han sido derribados, descartados, dejados en el olvido _esta es su campaña”.
Sanders, senador de Vermont, quedó en el segundo lugar, si bien su derrota representa un respiro momentáneo para los ansiosos demócratas de la clase dirigente que temían que el autodenominado demócrata socialista cerrara febrero con cuatro victorias consecutivas en las elecciones primarias.
El activista multimillonario Tom Steyer terminó con el tercer lugar, su mejor resultado en la campaña, la cual suspendió formalmente más tarde. Gastó más de 24 millones de dólares en publicidad televisiva en Carolina del Sur _más que todos sus rivales juntos_ pero nunca encontró una vía clara en una contienda atestada.
Siete aspirantes siguen en la lucha demócrata para encontrar al candidato más apto para enfrentar al presidente Donald Trump en noviembre.
Los aliados de Biden consideraron casi de inmediato su victoria en Carolina del Sur como una muestra de que debería ser considerado una alternativa clara frente a Sanders.
Quien continúa interponiéndose en el camino de Biden, además de Sanders, es el exalcalde de Nueva York, Mike Bloomberg, uno de los hombres más ricos del mundo _quien ha gastado más de 500 millones de dólares para cortejar a los electores en decenas de estados que aún no pasan por el proceso de votación.
Las elecciones primarias en Carolina del Sur representaron la primera gran prueba de apoyo del electorado de raza negra a los precandidatos. Y a pesar de que Biden, de 77 años, se alzó con la victoria cuando más la necesitaba, aún debe mostrar que tiene los recursos económicos y organizacionales para impulsar drásticamente su campaña en las próximas 72 horas. También enfrentará la presión de depender de sus relaciones de décadas con dirigentes partidistas para imprimir un nuevo sentido de certidumbre a su precandidatura.
The Associated Press declaró a Biden el ganador justo después de que cerraron las urnas en Carolina del Sur. La AP basó su decisión en datos de AP VoteCast, un sondeo al electorado realizado por la AP a través de NORC en la Universidad de Chicago. La encuesta mostró un convincente triunfo de Biden.
Incluso antes de la noticia sobre la victoria de Biden, Bloomberg anunció su propio plan para dar el domingo en la noche un discurso en horario estelar en dos cadenas televisivas. Bloomberg no precisó cuánto pagó por ese espacio televisivo, sin precedentes en las últimas décadas.
Y Sanders de antemano tiene la mirada puesta en el “Súper Martes”, jornada en la que espera tomar una ventaja insuperable de delegados.
El senador de Vermont, de 78 años, mira con una enorme confianza la contienda interna demócrata después de sus dos victorias consecutivas y un empate en el primer lugar en Iowa.