BOGOTÁ — Los casos del nuevo coronavirus seguían en ascenso en Colombia mientras el país sudamericano se preparaba para entrar en una cuarentena obligatoria a partir de la medianoche del martes. En tanto, la vecina Venezuela ordenó un aislamiento más drástico en varios estados centrales en donde se detectaron numerosos contagios.
El número de infectados con la enfermedad en Colombia alcanzó los 306 y con tres fallecidos, según las autoridades. La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, refirió que en la capital del país se registran 114 de los casos.
Colombia entra en un periodo de cuarentena desde la medianoche hasta el 13 de abril, y la alcaldesa advirtió que se castigará con multas a quienes la incumplan. El ministro de Salud, Fernando Ruiz, señaló por su lado que en esos días de aislamiento los servicios de salud, como cirugías programadas y entrega de medicamentos, continuarán y que los 12.000 hospitales a nivel nacional estarán atentos para prestar servicio a las personas que lo necesiten.
Mientras en Venezuela, ante los numerosos casos que se han detectado en Caracas y los estados centrales de Miranda y La Guaira, próximos a la capital, el mandatario Nicolás Maduro ordenó aplicar a partir del martes una cuarentena más extrema en esas regiones que implicará que un solo miembro por familia podrá salir a las calles a realizar las compras esenciales.
Maduro dijo la noche del lunes, en una llamada que realizó a un programa de la televisora estatal, que de los 84 contagiados con coronavirus que hay en el país 60 pertenecen a la región capital, que incluyen Caracas, Miranda y La Guaira. En la región capital fueron reportados los dos primeros casos el 13 de marzo.
“Solo debe salir una persona por familia para las necesidades vitales”, sostuvo el mandatario al explicar los alcances de la medida, según reseñó el portal de la emisora estatal YVKE Mundial.
Para garantizar el cumplimiento del aislamiento extremo se pidió apoyo a las organizaciones comunitarias conocidas como “consejos comunales”, a las policías y las fuerzas militares que desde la semana pasada recorren las calles de la capital y los principales mercados para limitar el tránsito y vigilar el cumplimiento de la cuarentena que comenzó el 16 de marzo.
El gobernante anunció el arribo el lunes al país de un cargamento de 10.000 test de detección del COVID-19 proveniente de Rusia. Las autoridades informaron la víspera que disponen de 7.000 test de diagnóstico y 50.000 pruebas rápidas.
Buena parte de los gobiernos en la región han arreciado las restricciones de movilidad en sus respectivos países ante el incremento de los contagios y realizaban numerosas detenciones de personas en las calles que las incumplían. Intentaban, al mismo tiempo, aumentar las pruebas para detectar el nuevo virus, así como habilitar instalaciones de emergencias para atender el alza de los casos.
Varios países también lidiaban con motines y protestas en las cárceles impulsadas por el temor de los internos de contagiarse en las celdas.
En Argentina, la secretaría de Asuntos Penitenciarios de la provincia de Santa Fe _unos 300 kilómetros al norte de Buenos Aires_ confirmó el martes que cinco reclusos murieron y otros dos resultaron gravemente heridos durante motines registrados en dos cárceles provinciales en reclamo de medidas de prevención por el nuevo coronavirus.
La alcaldía de la ciudad de Buenos Aires anunció el bloqueo de 59 de sus 84 accesos vehiculares. Apenas una veintena permanecerán abiertos, de los cuales la mitad podrán ser utilizados solo por el transporte público.
En América Latina se reportan de momento más de 5.700 contagiados y más de 83 muertos.
En todo el mundo, más de 390.000 personas se han infectado y más de 17.200 han muerto por el coronavirus, pero la mitad de los que alguna vez fueron contagiados se han recuperado. La mayoría de los enfermos presenta síntomas leves como fiebre o tos, pero las personas mayores o que tienen otros problemas de salud pueden sufrir complicaciones graves.
