Dos adolescentes chinos fallecieron mientras realizaban sus clases de gimnasia portando una mascarilla.
Ambos menores de edad tenían 14 años.
El primer hecho ocurrió el pasado 24 de abril en el establecimiento Dancheng Caiyuan Middle School en la provincia Henan, según medios internacionales.
El joven tenía pocos minutos de haber iniciado su prueba física cuando se desplomó.
El padre aseguró que maestros y compañeros le brindaron primeros auxilios.
Según el certificado de defunción, el joven falleció por un ataque cardiaco; sin embargo, según medios locales no se le realizó la autopsia.
Li considera que el uso del cubrebocas está relacionada con el fallecimiento.
Cao Lanxiu, profesor de la Universidad de Medicina China Shaanxi, asegura que es muy poco probable que la mascarilla haya asfixiado al menor.
Una semana después
El 30 de abril se registró el segundo hecho. Esto en el establecimiento Changsha’s Xiangjun Future Experimental School en la provincia de Hunan.
El menor estaba utilizando un respirador N95 mientras realizaba una prueba de 1000 metros.
En este caso tampoco se ordenó una autopsia por lo que no se puede afirmar que el uso de la mascarilla haya intervenido en la actividad física.
Sin embargo, según medios locales, por el momento las escuelas en Tianjin y Shanghái han cancelado las pruebas de educación física.
Reinicio de clases
En momentos en que muchos países europeos prevén reabrir las escuelas, el caso de China, donde la COVID-19 casi ha desaparecido, ofrece una visión de cómo se puede organizar la vida escolar después de la pandemia.
Muchos estudiantes chinos ya retomaron los cursos, principalmente los de los últimos años. En Shanghái y Pekín, la vuelta a clases se llevó a cabo a fines de abril.
Pero en los verdes campos del Liceo de Shanghái, una de las instituciones de secundaria más afamadas en esta metrópolis de 24 millones de habitantes, las medidas de distanciamiento social han cambiado los hábitos.