Por lo menos 5.600 personas han sido arrestadas en diversas ciudades de Estados Unidos desde que comenzaron las protestas por la muerte de George Floyd, de acuerdo con un conteo realizado por The Associated Press con base en comunicados de prensa de los departamentos de policía, en la actividad de las agencias policiales en Twitter y en reportes noticiosos.
Las protestas comenzaron después de la muerte de Floyd ocurrida el 25 de mayo en Minneapolis, luego de que el agente de policía Derek Chauvin oprimió su cuello con la rodilla durante varios minutos, incluso después que el detenido dejó de moverse.
Las protestas se han tornado violentas en algunas ciudades y el presidente Donald Trump ha exhortado a la policía y los gobernadores a tomar medidas más duras para poner fin a las manifestaciones.
En Minneapolis se han realizado cerca de 155 arrestos. Algunas de las ciudades más grandes de Estados Unidos han hecho una cantidad significativa de detenciones, incluidas casi 800 en Nueva York y más de 900 en Los Ángeles.
El presidente Donald Trump amenazó con desplegar al ejército a menos que los estados pongan fin a las protestas violentas.
Trump dijo que estaba recomendando que los gobernadores desplieguen a la Guardia Nacional en cantidades suficientes para “controlar las calles”.
Si los gobernadores no toman medidas, Trump dijo que desplegará al ejército nacional y “resolverá rápidamente el problema”.
En sus comentarios realizados desde la Rosaleda de la Casa Blanca, Trump señaló que movilizaría al ejército para poner fin a la “anarquía” mientras la policía lanzaba gas lacrimógeno a cientos de manifestantes reunidos afuera de la Casa Blanca.
Trump culpó a los anarquistas y al movimiento Antifa de fomentar los disturbios.
La policía lanzó gas lacrimógeno para dispersar una protesta cerca de la Casa Blanca, previo a que el presidente Donald Trump pronunciara un discurso a la nación.
Había una fuerte presencia policial y los agentes trataban de alejar a los manifestantes del Parque Lafayette, ubicado frente a la Casa Blanca.
Alrededor de 1.000 manifestantes se habían reunido para protestar por la muerte de George Floyd, ocurrida la semana pasada en Minnesota.
Un médico legista de Minnesota catalogó la muerte de George Floyd como homicidio, y dijo que su corazón se detuvo mientras policías lo mantenían inmovilizado y oprimían su cuello.
El reporte publicado el lunes enlistó “otras afecciones significativas” que Floyd padecía, desde problemas cardíacos e hipertensión, hasta intoxicación con fentanilo y consumo reciente de metanfetamina.
Un agente de la policía de Minneapolis ha sido acusado formalmente de homicidio en tercer grado por la muerte de Floyd, y otros tres agentes fueron despedidos.
Un video grabado por un transeúnte mostró al agente Derek Chauvin oprimiendo el cuello de Floyd con la rodilla, pese a sus gritos de “no puedo respirar”, hasta que el hombre eventualmente dejó de moverse. Su muerte ha provocado protestas durante varios días a lo largo y ancho de Estados Unidos, y algunas de ellas se han tornado violentas.
Una autopsia realizada por encargo de la familia de George Floyd reveló que el hombre falleció de asfixia por compresión de cuello y espalda cuando un policía de Minneapolis apretó su cuello con la rodilla por varios minutos e ignoró sus súplicas, informó el abogado de la familia el lunes.
La autopsia realizada por un médico que también examinó el cuerpo de Eric Garner, halló que la compresión bloqueó el paso de la sangre al cerebro de Floyd, y el peso sobre su espalda le dificultó respirar.
El resultado del procedimiento encargado por la familia difiere del obtenido en la autopsia oficial tal como aparece descrito en una querella penal contra el agente.
Esa autopsia incluía los efectos de permanecer inmovilizado, junto con problemas de salud subyacentes y posible presencia de estupefacientes en el organismo de Floyd, pero indicó no haber hallado nada “que respaldara un diagnóstico de asfixia traumática o estrangulamiento”.
Floyd, un afroestadounidense que en ese momento estaba esposado, murió luego que el policía Derek Chauvin, de raza blanca, ignoró las peticiones de los testigos de que se levantara y las súplicas de Floyd de que lo dejara respirar.
Su muerte, grabada en video por una transeúnte, detonó protestas en Minneapolis que se han extendido a otras ciudades de Estados Unidos.
La ciudad de Nueva York impondrá un toque de queda a partir de las 11 de la noche para tratar de impedir que se repitan los actos de violencia registrados durante las protestas de los últimos días contra el racismo.
El toque de queda expirará a las 5 de la mañana, anunciaron el lunes el gobernador Andrew Cuomo y el alcalde Bill de Blasio.
La limitación al movimiento de los 8,6 millones de habitantes de la ciudad más grande del país se suma a las restricciones impuestas por el coronavirus, y luego de que tanto el alcalde como el gobernador deploraran los hechos de violencia, pero también criticaran algunas acciones de la policía.
El presidente Donald Trump pidió a los gobernadores mano dura contra las protestas, diciéndoles: “La mayoría de ustedes son débiles”.
Trump habló por videoconferencia con los gobernadores, así como con autoridades del orden y la seguridad nacional.
El mandatario reprochó a los gobernadores por no utilizar la Guardia Nacional de manera más agresiva, lo cual los hace “parecer tontos”.
El fiscal general Bill Barr también estuvo en la llamada y les dijo a los gobernadores que deben “dominar” las calles y controlar, no reaccionar ante las multitudes. Les pidió ir detrás de los “alborotadores” y usar “la fuerza adecuada”.
El Distrito de Columbia ordenó un toque de queda lunes y martes a partir de las 7 de la tarde, después de tres días de violentas protestas.
El domingo a las 11 de la noche se impuso un toque de queda, pero la violencia se intensificó, con manifestantes incendiando, rompiendo ventanas y saqueando negocios. Hubo enfrentamientos con la policía, que utilizó gas pimienta y otras medidas para frenar las manifestaciones.
Unas 60 personas fueron arrestadas en Oakland, incluidas tres por sospecha de asalto con un arma mortal a oficiales. Los tres supuestamente dispararon contra la comisaría desde un automóvil justo después de la medianoche. Ningún oficial resultó herido, dijeron las autoridades.
La ciudad de 430.000 personas al otro lado de la bahía desde San Francisco no ha impuesto toques de queda.
La policía de Portland, Oregon, arrestó a 12 personas —dos de ellos menores de edad— que arrojaron objetos a los policías. Las manifestaciones de miles de personas fueron pacíficas durante gran parte del día, pero el domingo por la noche cientos se reunieron frente al Centro de Justicia del condado Multnomah, en el centro.
La policía dijo que los manifestantes rompieron ventanas en la sede de un tribunal federal.
En Francia, familiares y amigos de un hombre negro francés que murió tras ser detenido en el 2016 convocaron a una protesta para el martes, en que también rendirán honor a George Floyd.
Las circunstancias de la muerte de Adama Traore, un francés de origen malí de 24 años de edad, están siendo todavía investigadas.
La convocación a la protesta para el lugar frente al tribunal de París ocurre luego que algunos expertos atribuyeron la defunción a un problema cardíaco, el más reciente de una serie de evaluaciones contradictorias sobre esa muerte.
Una protesta en la carretera que conduce a Albuquerque se tornó violenta el lunes cuando los alzados provocaron pequeños incendios y dispararon contra policías, informaron autoridades.
El portavoz de la policía de Albuquerque Gilbert Gallegos dijo que los agentes reportaron disparos frente al teatro Kimo la mañana del lunes, aunque la protesta había comenzado pacífica.
Añadió que hubo daños a propiedades, con ventanas rotas e incluso saqueos.
Nadie resultó lastimado.