La senadora Rossana López León alertó al Departamento de Hacienda que está recibiendo múltiples llamadas en su oficina, mensajes electrónicos en las redes sociales de ciudadanos retirados que reciben el Seguro Social y que aún no han recibido el incentivo de $1,200 que provee la Ley CARES. De igual manera, en sus visitas a distintas comunidades, donde se ha estado distribuyendo mascarillas, la senadora ha recibido el mismo reclamo.
La denuncia de la senadora coincide con mensajes electrónicos recibido por diversas vías en la redacción de Metro Puerto Rico de ciudadanos jubilados a quienes no les ha llegado la ayuda del incentivo por la emergencia. “Nos dejaron a los viejos para lo último”, dijo una quejosa ciudadana a este diario.
“Ya estamos en la segunda semana de julio y tenemos muchas personas atentos al depósito. El pasado 9 de mayo, el secretario del Departamento de Hacienda, Francisco Parés Alicea informó que las personas que no radican planillas y sus ingresos provienen de las pensiones del seguro social o el sistema de retiro iban a comenzar a recibir el incentivo de $1,200 por la pandemia de COVID-19 a partir de finales de mayo. Habiendo transcurrido más de un mes del aviso, naturalmente los ciudadanos se cuestionan si nuevamente Hacienda está teniendo dificultades en realizar los pagos”, añadió la también exprocuradora de las Personas en Edad Avanzada.
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La senadora informó de que decenas de personas de edad avanzada, familiares y cuidadores tienen problemas para acceder al Sistema Unificado de Rentas Internas (SURI) de Hacienda para recibir el incentivo federal de 1,200 dólares para paliar los efectos de la pandemia del Covid-19.
Precisamente el pasado 30 de mayo, la senadora hizo un reclamo público al Departamento de Hacienda, ya que los ciudadanos que entraban al servicio cibernético Sistema Unificado de Rentas Internas (SURI) se estaban encontrando con un mensaje que les exhorta a tratar más tarde por la alta demanda en el sistema.
“Todos en Puerto Rico sabíamos que venía una alta demanda de acceso a esa página y la experiencia evidencia que no hubo la preparación adecuada para atender a la ciudadanía”.
Datos de la Asociación Americana de Personas Retiradas (AARP), capítulo de Puerto Rico, estima que hay unos 550,000 retirados que reciben el Seguro Social y de ellos unos 100,000 pagan contribuciones federales, por lo que estas personas debieron recibir sin ningún problema su depósito de $1,200. “Estamos hablando de un sector de la población que es altamente vulnerable y con con necesidades particulares. Mi exhortación al secretario Parés es que informe cuántos pagos faltan por realizar y cuál es el plan para realizarlos. Los retirados esperan por usted”, finalizó la senadora.
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