El Banco de Alimentos de Puerto Rico, en un esfuerzo para crear conciencia contra el hambre, lanzó la iniciativa “Hambre Cero Puerto Rico”, que potenciará la educación y mecanismos para trabajar hacia la meta de lograr seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover una agricultura sostenible en Puerto Rico.
“Luego de los huracanes, terremotos y la pandemia que vivimos, se ha descorrido el velo de lo que no queremos ver: el hambre en nuestra Isla. El incremento de demanda de alimentos que hemos tenido en el Banco de Alimentos evidencia esta realidad. No podemos resolver los problemas que ignoramos. Es momento de asumir la responsabilidad ineludible de acabar con el hambre en Puerto Rico,” dijo Denise Santos, presidenta del Banco de Alimentos de Puerto Rico, entidad aliada a Feeding America.
Para comenzar a lograr seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover una agricultura sostenible, la iniciativa “Hambre Cero Puerto Rico”, presentará cinco diálogos sostenidos virtuales y cuatro documentales que se transmitirán por diversas plataformas, orientados a soluciones durante la semana del 21 al 25 de septiembre.
Esfuerzo colaborativo
Asimismo, se indicó que parte fundamental de este movimiento será el acuerdo de colaboración con el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico para comenzar a elaborar las metas progresivas del objetivo de desarrollo sostenible número #2, Hambre Cero, de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
De igual forma, las charlas y documentales “Hambre Cero Puerto Rico” se transmitirán a través de las redes sociales del Banco de Alimentos en horarios que serán anunciados con antelación.
Además, explicaron que, durante el periodo del 2011 al 2015 se encontró que 40 municipios tenían un 50% o más de sus hogares bajo niveles de pobreza, la cual ha incrementado a partir del 2017.
De acuerdo al perfil de la pobreza infantil en Puerto Rico realizado por el Instituto de Desarrollo de la Juventud, seis de cada diez niños viven bajo los niveles de pobreza.
Finalmente, según el Banco Mundial es imperativo reducir la pobreza para lograr el objetivo de seguridad alimentaria, mejor nutrición y promover la agricultura sostenible.